El Caja Rural CPLV se impuso al Tres Cantos en el primer partido de su eliminatoria de semifinales por el título liguero. Lo hizo en un vibrante encuentro en la pista del polideportivo Laura Oter, con siete goles y emoción hasta el último segundo. La victoria le acerca a la final, aunque para estar en ella deberá sumar otro triunfo. Eso sí, con el factor campo a favor, la serie se decidirá el fin de semana del 30 de abril y 1 de mayo en Cantetac.

El partido de este sábado comenzó muy cuesta arriba para el Caja Rural CPLV, con dos goles en contra en dos minutos. El primero del norteamericano Dimartino, tras robar el disco muy cerca de Raúl Aymerich, lanzar rápido y aprovechar el rechazo del portero. El segundo, del checo Natan Vrablik, en una jugada individual. A pesar del golpe moral, una recuperación muy cerca de la valla, fue aprovechada por Mario Díez para recortar distancias en el minuto 3. A partir de ese momento el encuentro bajó un poco el ritmo, muy vivo en ese comienzo. Y el cuadro vallisoletano trató de dominar con la posesión, como suele gustarle, a pesar de lo complicado que es hacerlo en una pista como la de Tres Cantos.

Con ese control, llegaron las ocasiones. La primera clara fue del vallisoletano Dani Díez, que mandó la pastilla al palo. Era el minuto 7. Tras esa ocasión, a los pucelanos les tocó defender una inferioridad, aún más claves en estas pistas tan pequeñas. Lo hicieron bien. Y siguieron buscando el empate, que encontraron a ocho del descanso, en un ataque peleado por todos y que acabó aprovechando Andrés Baños para hacer el 2-2. Y a punto estuvo de llegar el 2-3, en un lanzamiento de Mario Díez, con uno más en la pista, al palo. Segundo en la primera parte. Desde ahí al descanso, pocas ocasiones y dos superioridades, una por bando.

Tras el intermedio, el partido entró en una espiral de muchas expulsiones, en las que ninguno de los dos supo aprovecharse. El Caja Rural CPLV llegó a estar un minuto con dos más, pero el portero canadiense James Teed evitó con varias buenas intervenciones el gol. El partido parecía controlado por los vallisoletanos, pero sin confianzas, porque el que marcase iba a tener mucho ganado. Y lo hizo el cuadro pucelano, por medio de Mario Díez, tras una inferioridad bien defendida. El vallisoletano peleó una pastilla, la robó y batió con lanzamiento por debajo de las guardas la portería local. Quedaban algo más de 7 minutos y lejos de bajar a defender el resultado, el CPLV siguió atacando. Fruto de ello, llegó el 2-4, de Eloy Valls. Ahora sí, con 4 minutos por delante, los vallisoletanos trataron de no arriesgar. Lo hicieron bien hasta que a dos para el final, el Tres Cantos arriesgó con portero-jugador, y al Caja Rural le llegó una nueva expulsión. Con 5 para 3 en pista, Vrablik puso emoción con el 3-4, pero, con un minuto por jugarse, el CPLV defendió bien, logrando la primera victoria de la serie para colocarse más cerca de la final.