Campeona olímpica, doble campeona mundial y tetracampeona europea. A ello, hay que sumarle incontables medallas de planta y bronce. Ese es el palmarés que deja una de las mayores leyendas del deporte español, Lydia Valentín. La de Ponferrada, León, ha anunciado este jueves, 21 de septiembre, su retirada del deporte de élite en un acto de despedida por todo lo alto en la sede del Comité Olímpico Español. "Me voy feliz, llena, tranquila y muy, muy agradecida", ha reconocido la berciana.
Y es que Lydia ha querido que este día sea una "celebración" a su trayectoria y a todos los éxitos que ha cosechado en su dilatada carrera en la halterofilia. La deportista castellana y leonesa, con voz de orgullo, ha reconocido haber conseguido "mucho" y "más de lo que nunca" se había imaginado.
Además de una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, Lydia cuenta en su palmarés con otros dos metales en la competición más importante de su deporte. En Pekín 2008 se llevó la plata y en Río de Janeiro 2016 el bronce. Además, en los mundiales, además de los dos oros, tiene una plata y un bronce y en los europeos cuenta con un total de 12 metales.
"He puesto mi deporte en lo más alto del mundo y he hecho historia en mi país", ha afirmado, para continuar aclarando que está "feliz" por la decisión que ha tomado y "muy tranquila". "A partir de hoy comienza una nueva vida para mí que estoy segura de que estará llena de éxito dado que llevo en mi carácter todos los valores que me ha inculcado el deporte de alto rendimiento y eso te curte la piel", ha dejado claro.
Asimismo, ha querido aclarar que "nunca" se despedirá de la halterofilia. "Es mi deporte y me ha llevado a lo más alto. Siempre estaré unido a ella", ha insistido con rotundidad suprema. "Gracias a todos por formar parte de este viaje tan maravilloso para mí", ha sentenciado.