R. Travesí / ICAL
La subida de precios imparable, que en junio de situó en el 11,6 por ciento en Castilla y León, tiene un importante sobrecoste en las familias. Hasta el punto que con esta inflación, el gasto medio de los hogares de la Comunidad aumentará 3.947 euros euros. Es decir que las familias se verán obligadas a desembolsar casi 4.000 euros para pagar los mismos productos, de los que más de la mitad corresponde a los gastos relacionados con la vivienda como el alquiler, la hipoteca, la luz, el gas, el gasóleo para la calefacción y el agua.
La Encuesta de Presupuestos Familiares del Instituto Nacional de Estadística (INE), con datos de 2021, recogió que el gasto medio anual por hogar en Castilla y León se situó en 27.132 euros. De esa cifra, según los cálculos realizados por la Agencia Ical, 8.747 euros estaban reservados a los gastos que genera una vivienda. La tasa de variación anual del Índice de Precios al Consumo (IPC) en la vivienda en el mes de junio alcanzó el 25,9 por ciento. Por lo tanto, las familias castellanas y leonesas se ven obligadas a destinar 2.265 euros más para hacer frente a los gastos de la vivienda.
Le sigue el transporte, por el incremento de los carburantes y combustibles. Si una familia gastó de media 3.422 euros el año pasado en esta partida, ahora debería pagar 677,5 euros más tras una subida de los precios del 19,8 por ciento. Pagar los alimentos, que son el tercer grupo que más se ha encarecido, obligará a las familias a gastar 621 euros más al año, ya que esta partida aumentó un 13,7 por ciento en junio, cuando el desembolso en 2021 fue de 4.539 euros.
Estas tres categorías (vivienda, transporte y alimentación) se llevan el grueso de los cerca de 4.000 euros de sobrecoste que deberán afrontar los hogares de la Comunidad. No en vano, absorben el 90 por ciento del incremento.
A continuación, aparece el gasto extra de 154 euros que los hogares deberán afrontar en restaurantes y hoteles, con la inflación registrada en junio. Se completa con los muebles y artículos de hogar (61 euros de sobrecoste), ocio y cultura (38,4 euros), vestido y calzado (30 euros), bebidas alcohólicas y tabaco (17 euros), sanidad (ocho euros) y enseñanza (un euro de más). El único descenso, que es imperceptible, tuvo lugar en el grupo de comunicaciones, con 2,5 euros, después de que los precios hayan bajado un 0,3 por ciento en junio.
Segundo mayor IPC de España
El IPC en Castilla y León creció un 2,1 por ciento en junio con respecto al mes de mayo, y se disparó un 11,6 por ciento sobre el dato de hace un año, lo que coloca a la Comunidad con la segunda tasa interanual más alta del país, tan solo por detrás de Castilla-La Mancha (12,7 por ciento).
El crecimiento anual fue así casi punto y medio superior a la media del país, que con un 10,2 por ciento interanual se encuentra un punto y medio por encima de la registrada en el mes anterior y se configura como las más alta desde el mes de abril de 1985.
Además, la tasa de variación anual de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) aumentó el mes pasado seis décimas, hasta el 5,5 por ciento. Es la tasa más alta desde agosto de 1993 y sitúa su diferencia con la del IPC general en más de cuatro puntos y medio.