Lo adelantó hace casi un mes a este periódico el Colegio de Economistas de Castilla y León y Funcas lo advierte hoy también: tras los buenos datos de ocupación e impulso del consumo lógicos en época estival, llegará una importante desaceleración que podría incluso hacer cerrar las principales economías autonómicas y nacional en negativo.
Hoy es la AIReF quien ha emitido un informe en el que advierte de que Castilla y León cerrará 2022 con un déficit del 0,8% sobre el PIB, lo cual supone dos décimas menos que lo previsto en el informe de la autoridad fiscal independiente del pasado mes de abril.
Un descenso que, según la AIReF, proviene de una ejecución más acusada del gasto ajeno al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) que eleva su nivel esperado al cierre del ejercicio.
Este dato coincide con las previsiones que el Ejecutivo de Mañueco maneja para el cierre de 2022, con un presupuesto que permanece prorrogado tras la celebración de las pasadas elecciones de febrero.
La AIReF estima que los recursos esperados al cierre de 2022 alcanzarán un 16,4% del PIB sin considerar los ingresos del PRTR. Además, los recursos sin PRTR que percibirá la Comunidad este año descenderán un 5% sobre el nivel de 2021 (un 3% sin tener en cuenta las ayudas a empresas del RDL 5/21). Esta minoración está condicionada fundamentalmente por la reducción de las transferencias del Estado: recursos del sistema de financiación, transferencias extraordinarias no condicionadas y las ayudas a empresas de la Línea Covid.
Bajo las nuevas estimaciones, los empleos autonómicos en su conjunto se reducirían cerca del 1% sobre el nivel alcanzado en 2021, condicionados por la reducción esperada de las medidas autonómicas vinculadas a la pandemia (cerca del 55%, inferior a lo esperado en el informe anterior) y del gasto por las ayudas a empresas del RDL 5/2021 (de 211 millones de euros en 2021 a 22 millones de euros por su reintegro en 2022). Estas minoraciones, no obstante, se compensarían en gran parte por el crecimiento esperado de otros empleos no asociados a la pandemia.
Recaudación muy por encima de lo previsto en 2021
La recaudación real de 2021 se ha situado muy por encima de las previsiones bajo las que se calcularon las entregas a cuenta del sistema de financiación en dicho año. Esto va a generar una liquidación muy positiva que, sobre la negativa del año anterior (sin perjuicio de que haya sido compensada) supondrá un excepcional crecimiento de los recursos del sistema de financiación en 2023.
En 2024 podría replicarse una situación similar, ya que todo apunta a que la recaudación real de 2022 puede estar por encima de la estimada para calcular las entregas a cuenta de este año. En definitiva, en Castilla y León los recursos del sistema de financiación podrían crecer, de acuerdo con las estimaciones de la AIReF, más de un 20% y un 8%, respectivamente, en 2023 y 2024. Por el contrario, en 2025 podrían disminuir ligeramente sobre el nivel del año anterior.
La AIReF estima que, aplicando completamente los excesos de financiación acumulados y bajo sus previsiones de 2022, la ratio deuda/PIB de la Comunidad de Castilla y León se situaría al cierre del ejercicio en un 21,4%. Partiendo de un 22,6% en 2021, la ratio mejoraría por el efecto del crecimiento previsto del PIB y en menor medida por los ajustes stock-flow, que compensarían el efecto del déficit previsto al cierre del ejercicio.