En España es uno de los indicadores más claros para analizar la economía de mercado. A pesar de seguir siendo uno de los valores refugio de los inversores, el sector del ladrillo continúa reflejando la situación real del poder adquisitivo de los ciudadanos y la incertidumbre política y jurídica.
En Castilla y León la compraventa de vivienda ha vuelto a caer y lo ha hecho en casi un 8% en noviembre del año pasado hasta las 2.186 (79 menos que durante el mes anterior y 185 menos que hace un año), según los datos adelantados hoy por el Instituto Nacional de Estadística.
Una cifra que, a pesar de todo, es casi ocho puntos menos pronunciada que la registrada en el conjunto del país, que cerró el undécimo mes del año pasado con una importante caída del 15,1%.
José Manuel Martínez Irianzo, presidente de API Castilla y León, analiza estos datos y apunta a que "esperamos que los precios en la compraventa de vivienda sigan estables o incluso retrocedan aún más, lastrados por la pérdida de poder adquisitivo de la ciudadanía, así como por la inseguridad política y jurídica que hay en España".
Sin embargo, espera que "a partir del segundo semestre del año y si bajan los tipos de interés, el mercado pueda comenzar a recuperarse poco a poco".
"Ha habido un frenazo importante en el último trimestre de 2023 y sí hemos visto construcción de obra nueva en Castilla y León pero sólo en determinadas zonas", añade.
Sólo las provincias de Soria (15%) y Zamora (7,4%) fueron capaces de incrementar el número de compraventa de viviendas en noviembre del año pasado, mientras cayó en el resto de las provincias de Castilla y León.
En el conjunto de España se vendieron en pasado mes de noviembre 8.357 viviendas menos que en el mimo mes del año 2022, hasta alcanzar las 46.888, es decir, un 15,13% menos. Por tipo de vivienda adquirida, la caída es del 11% en inmuebles nuevos, lo que significa casi el doble del retroceso experimentado en la vivienda de segunda mano.
En lo que respecta a Castilla y León, la venta de vivienda nueva se contrajo un 13,2% con respecto a noviembre de 2022 y la de segunda mano lo hizo más tímidamente, en un 6,5%.
El mercado continúa achacando la pérdida de poder adquisitivo tras dos años de espiral inflacionista y parece estar esperando a que el Banco Central Europeo dé muestras claras de que bajará los tipos de interés a lo largo del segundo semestre del año, actualmente en el 4,5%.
Unos tipos de interés que la zona euro decidió incrementar para precisamente frenar el gasto y con éste doblegar la curva inflacionista que llegó a escalar hasta el 11% en Castilla y León en julio de 2022, y que actualmente se encuentra ya en el 2,8%.