Esta es la 'libertad económica' de los Ayuntamientos de Salamanca, Burgos y Valladolid: un notable y dos toques de atención

La Fundación para el Avance de la Libertad publica cada año, desde 2018, el Índice de Libertad Económica de las Ciudades Españolas (ILECE), que mide el desempeño macroeconómico, el volumen y coste del personal, el grado de intervencionismo económico municipal, y la carga tributaria municipal sobre los vecinos y las empresas en las 50 ciudades más pobladas de España.

Entre los principales indicadores del ILECE se contempla el coste del ayuntamiento −presupuesto partido por población−, el grado de endeudamiento, la morosidad, la capacidad de atracción de empresas, la externalización o municipalización de servicios, la presencia municipal en empresas, la cantidad de empleados y su coste salarial, la voracidad sancionadora, el coste de la zona azul o los principales impuestos municipales, como el IBI, el IVTM, el IAE, los coeficientes de situación, o el ICIO, de construcción.

El ILECE presenta una gráfica de evolución y un análisis de la situación de cada una de las cincuenta ciudades analizadas y las áreas donde tienen mayor espacio de mejora. Juan Pina, secretario general de la Fundación para el Avance de la Libertad, autora del informe, ha señalado que "existen grandes diferencias entre las políticas municipales de los ayuntamientos que mejor y peor desempeño exhiben en el ranking, y ello no guarda relación directa con el color político de cada uno".

En el caso de Castilla y León, se han analizado tres ciudades: Salamanca, Valladolid y Burgos, con un desempeño muy diferente, ya que la primera ha avanzado y las dos últimas han retrocedido de forma notable con respecto al ILECE del año pasado, coincidiendo, además, con un cambio de Gobierno municipal en ambas capitales.

El crecimiento de Salamanca

La ciudad de Salamanca cuenta con una libertad económica "moderada" ya que se sitúa en el 18º puesto de España en libertad económica y ha ganado 14 puestos desde el 32º en el que situaba hace solo un año. Además, ha subido 2,54 puntos con respecto a 2023, pasando de 55,22 el año pasado a 57,76 en 2024. La capital salmantina mejora puntuación por quinto año consecutivo y, pese a no ser una subida enorme, resulta suficiente en esta franja de la tabla, tan concurrida, para ganar bastantes puestos y cosechar su mejor posición histórica.

Según se ha detallado en el ILECE, Salamanca presenta unos impuestos (IBI e IVTM) muy elevados, y aunque no lleva al máximo el ICIO aún tiene espacio de mejora reduciendo este tributo que define como "tan perjudicial para el desarrollo y para el acceso a la vivienda". Por otro lado, afirma que los salmantinos "tocan a demasiados empleados municipales por 100 habitantes" y advierten de que "contener la proliferación de esa plantilla debería ser un objetivo del equipo de Gobierno en esta legislatura".

Valladolid sufre una fuerte caída en el último año

Muy diferente es el caso de Valladolid. La ciudad del Pisuerga ha sufrido un gran retroceso en libertad económica durante el último año, según el ILECE, pasando del octavo puesto en el que se encontraba en 2023 al 32º en el que se sitúa en la actualidad. En concreto, ha bajado 10,11 puntos, pasando de los 62,51 de 2023 a los 52,4 actuales, y cuenta con una libertad económica "aceptable", según este estudio. 

En el mismo se detalla que la fuerte caída de Valladolid, que se ha producido coincidiendo con el primer año del popular Jesús Julio Carnero al frente del Consistorio, "puede ser parcialmente coyuntural" y que será necesario esperar a 2025 "para ver si se consolida como tendencia, regresando a la tónica habitual de la ciudad tras dos años excepcionales".

El principal problema, según se detalla en el ILECE, es "la elevada carga tributaria municipal que pesa sobre los vallisoletanos y sus empresas", por lo que esta ciudad suspende en el área D del índice. El coste general, presupuesto partido por población, es "mejorable", como también el grado de endeudamiento. "Valladolid no atrae, comparativamente, suficiente traslado o generación de empresas. Necesita contener plantilla y moderar su coste para los vecinos", se afirma.

Gran retroceso de Burgos desde 2023

La ciudad de Burgos ha sufrido, al igual que Valladolid, un gran retroceso en libertad económica según el ILECE en el último año, coincidiendo con los primeros 12 meses de mandato de la popular Cristina Ayala. La capital burgalesa ha pasado del 24º puesto en el que se encontraba en 2023 al 33º en el que se sitúa en la actualidad. En concreto, ha bajado 4,99 puntos, pasando de los 57,27 de 2023 a los 52,28 actuales, y cuenta con una libertad económica "aceptable", según este estudio

En el ILECE se ha señalado que la ciudad de Burgos "corrige de golpe dos años de avance rápido". "Es pronto para alertar de un cambio de tendencia, pero el equipo de Gobierno debería adoptar medidas de fomento de la libertad económica", advierte. Burgos suspende en el "elevado grado de intervencionismo municipal", y presenta "datos mediocres" en las demás áreas, pero especialmente en cuanto a los grandes datos de desempeño económico del municipio.

Así, el coste general del Ayuntamiento partido por la población, según se indica, "es muy mejorable" y pesa "sobre todo el endeudamiento". "Por otro lado, la ciudad necesita adoptar medidas capaces de atraer empresas. El IVTM es mejorable", afirma el ILECE. Un notable y dos toques de atención en las tres capitales de provincia más pobladas de Castilla y León.