COAG llama a las uniones regionales a movilizarse ante "la tormenta perfecta" en el campo
La Comisión Ejecutiva de COAG planteará a las uniones regionales la convocatoria de un proceso general de movilizaciones agrarias en el pleno del próximo martes, ante la nueva PAC, el alza en los precios de la luz o los bajos precios en el campo.
Según argumenta el secretario general de COAG, Miguel Blanco, “hay más que motivos para salir a la calle a reivindicar un plan urgente de medidas de apoyo. Los hombres y mujeres del campo nos enfrentamos en estos momentos a una tormenta perfecta”.
La espectacular subida de los costes de producción, precios a la baja en origen con diferenciales entre el campo y la mesa por encima del 450 por ciento, mayores exigencias pero menos ayudas con la nueva PAC y una propuesta de reforma de Ley de Cadena Alimentaria que no acaba de atajar las prácticas comerciales abusivas y la venta a pérdidas.
Si se aprueba el Plan Estratégico Nacional, sobre la base de los términos planteados por el Ministerio de Agricultura, el agricultor profesional sería el gran perdedor de la aplicación de la nueva PAC en España, pues la definición de "agricultor activo” finalmente se aleja del agricultor profesional e incluye a todos los titulares de explotaciones aunque su actividad agraria sea residual.
De esta manera, como explica, cerca de 250.000 perceptores PAC, cuya actividad agraria es insignificante (menos del 10% de sus ingresos totales), además de la ayuda básica reconocida, tendrán también acceso a las ayudas redistributivas, asociadas y ecoesquemas, sin que haya ningún tipo de priorización para los agricultores y agricultoras profesionales.
“Los beneficios caídos del cielo de las eléctricas ponen los costes de producción del campo por las nubes”, afirma, para indicar que la espectacular subida de la luz supone, por ejemplo, que en una comunidad de regantes de olivar, la factura eléctrica haya subido un 150 por ciento desde el pasado mes de abril hasta agosto.
Por otro lado, subraya que el proyecto de Ley de Cadena Alimentaria encara la recta final de las negociaciones en el Congreso de los Diputados y no se debe dejar pasar esta gran oportunidad para reforzar dicha normativa y aliviar las enormes dificultades que atraviesan agricultores y ganaderos.