Los cazadores y los aficionados a la cinegética de Castilla y León dicen basta. El proyecto de Ley de Bienestar Animal, aprobado el pasado lunes en el Consejo de Ministros y donde Unidas Podemos ha sido el ideólogo ya que es elaborada por la Consejería de Derechos Sociales y Agenda 2030, no ha gustado nada a la federación de caza de Castilla y León, que ve en ella una “amenaza a la actividad cinegética y un ataque al mundo rural”.
Belarra, ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, ya había adelantado que los perros de caza seguirían incluidos en la ley, con lo que la actividad cinegética no queda fuera, como exige la RFEC. "Un perro es un perro independientemente a lo que se dedique", afirmó la ministra de Unidas Podemos. Por eso, todas las miradas están puestas en el socio de Gobierno, el PSOE nacional, ya que se comprometió con el sector cinegético a excluir a los perros de caza de la ley, ya que deben considerarse como animales de producción y no como animales de compañía. En caso de salir adelante, los perros de caza se deberán inscribir como animales de compañía y darse de alta como criadores profesionales si quieren establecer cruces entre sus canes, en caso contrario deberán castrar a los perros, lo cual queda dentro de una Ley de Bienestar Animal “un disparate sin precedentes”, apunta el presidente Santiago Iturmendi en respuesta a la llamada de EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León.
Iturmendi recuerda que esta ley no “tiene sentido” partiendo de que “los animales no pueden ser sujetos de derecho, es algo básico en lo jurídico. Un ser vivo que no tiene obligaciones no puede tener derechos” e insiste en que desde la Federación se defiende el “tolerancia cero, con el maltrato animal, pero tonterías las justas”. Se trata de una ley para regular una actividad, la caza, que está “híper reglada y cuyas competencias están transferidas a las regiones, por lo que el sector solicitó que quedaran excluidas”.
"Amenaza al mundo rural"
Además, al no estar excluida la caza de esta ley, le afectan de lleno las obligaciones establecidas respecto a los animales de compañía, destacando la obligación de mantenerlos integrados en el núcleo familiar, o en el caso de animales gregarios como son los perros procurarles la compañía que precisen. Por ello, el texto, que "amenaza" a seguir con actividades como la caza, queda en una situación, según la entidad, de total "inseguridad" con la inclusión de todos los animales vertebrados en los delitos de maltrato, la consideración como animales de compañía de los perros de caza, la obligatoriedad de su esterilización y la prohibición de criar. Aquí es donde más énfasis hace el presidente autonómico. “No se puede comparar a un perro que va en brazos de una señora con un jersey de lana que uno que está criado para salvar vidas en terremotos”, pone de ejemplo.
Santiago Iturmendi recuerda que hay razas que “nacen para estas laborales” como los que están destinados a las labores en el campo, de pastoreo y guarda del ganado, a la cinegética a los trabajos auxiliares. “A estos perros si les llevas a una perrera montan un pollo descomunal”, afirma. Además, recuerda que otra de las medidas del Gobierno era que los perros no pudieran ‘trabajar’ hasta haber cumplido los 18 meses, aunque pueda iniciar el entrenamiento antes de alcanzar esa edad. En cuanto a su jubilación, su edad será determinada por un veterinario, que expedirá un informe de aptitud y bienestar cada año a partir de los 7 de edad. “Más disparates”, insiste.
"Intereses económicos"
Un proyecto de ley, que en las próximas semanas será remitido a las Cortes para iniciar su tramitación parlamentaria, y donde ya algunas Federaciones han informado de su intención de mantener reuniones con todos los partidos con representación en el Congreso con el objetivo de instar a los grupos a votar en contra de la ley. De momento Castilla y León no lo ha decidido. Ante esto, anuncian que saldrán a la calle para protestar, aunque también lo haremos en las urnas que es donde más les duele”, afirma Iturmendi, que cree que detrás de esta nueve ley “solo” hay intereses económicos. “Algo que estábamos haciendo de manera altruista va a pasar ahora a ser de pago. Veremos que venden perros a millón”
Otra de las prohibiciones que podría haber y de graves consecuencias sería la prohibición de la caza de perdiz o el tiro al pichón, al prohibir la tenencia, cría y comercio de animales de fauna silvestre en cautividad, las granjas cinegéticas, el silvestrismo.
Noticias relacionadas
- Iturmendi tacha de "atentado al sentido común" prohibir la caza de la codorniz habiendo 3 millones de ejemplares
- La Federación de Caza de Castilla y León reparte alimentos en la Culebra para la recuperación de la fauna
- Cs Valladolid insta al Ayuntamiento a adaptar la ordenanza municipal a la Ley de Bienestar Animal