El Consejo de Ministros adoptó hoy el acuerdo por el que se toma razón de la declaración de emergencia de las actuaciones necesarias para dar cumplimiento al Convenio de Albufeira en el año 2021-2022 mediante la movilización de 400 hectómetros cúbicos de reservas del embalse de Almendra, de la cuenca del Duero, por un importe máximo de 1,65 millones de euros, según recoge Ical.
Un convenio que ha provocado la indignación del sector agrícola en uno de los años más secos que se recuerdan. Así, Lorenzo Rivera, presidente de COAG en Castilla y León, pide "revisar sin demora el Convenio de Albufeira aprobado en 1998 para reducir su caudal dado que, cuando se puso en marcha, las condiciones meteorológicas eran otras; además de que se necesita construir más presas para almacenar el agua cuando haya períodos más secos".
El responsable de esta organización agraria denuncia "el abandono absoluto del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) para con el sector primario, a cuyo frente se encuentra una ministra fanática que ha dado la espalda a todo nuestro sector sin escucharnos nunca".
El desembalse de la presa de Almendra, en Salamanca, dejará esta infraestructura en el 18% de su capacidad de almacenamiento, en uno de los años más secos que se recuerdan. Un hecho que Rivera califica de "error que hay que reorientar hacia el consumo humano y el agrario, dado que no tiene sentido que los embalses se destinen a energía hidroeléctrica hoy en día en países con escasez de agua, teniendo otros sistemas ya muy desarrollados como la solar, eólica o fotovoltaica".
Más presas para almacenar agua
Castilla y León ha demolido 180 presas en los últimos quince años. Una política que, a juicio de Rivera, "obedece más a fanatismos ideológicos que a decisiones con sentido común, porque las condiciones climáticas varían y cuando no tengamos agua, a ver qué pasa", insiste.
El invierno de 2017 a 2018 fue especialmente lluvioso "y hubo que desembalsar agua directa al mar, y esto es una aberración porque de haber tenido más capacidad de almacenamiento, habría servido ese agua para consumo humano y producción agraria, que es la alimentación de todos, durante el año siguiente", indica.
Y en medio de todo este asunto, siguen en el aire las alegaciones que al Plan Hidrológico Nacional presentaron las diputaciones y las organizaciones agrarias el pasado mes de diciembre al Miteco, que "sigue sin contestar a nada, así que cuando muchos pueblos se queden sin agua, se darán cuenta de que lo que habían previsto en el Ministerio, no valía para nada".
"Si siguen mirando sólo hacia el falsamente denominado ecologismo, el consumo de agua humano podrá estar en peligro antes de lo que nos imaginamos", ha advertido.
Rivera considera que "no se está haciendo frente de forma valiente al gravísimo problema que tenemos con el agua" y prueba de ello es que "la Confederación Hidrográfica del Duero sigue sin presidente, más de un mes después de que anunciara su jubilación la anterior mandataria". Una situación que, según el representante de COAG, "afecta a la transparencia porque no han salido ni a dar datos de desembalses".