En un complicado escenario para la industria del automóvil, marcado durante los dos últimos años por la pandemia y la crisis de los semiconductores, la multinacional burgalesa Grupo Antolin ha demostrado una especial fortaleza al seguir siendo clave para los fabricantes de vehículos a la hora de adaptarse con garantías de éxito a los retos que marca el sector. Unas garantías que pasan por incorporar sistemas tecnológicos innovadores que conviertan el vehículo en un espacio futurista donde compartir, charlar o incluso, trabajar, además de su función como medio de transporte.
Con 25.000 empleados y una facturación que en el pasado ejercicio ascendió a los 4.055 millones de euros, Grupo Antolin se ha convertido en un proveedor global de referencia en soluciones tecnológicas e innovadoras para las principales compañías del mercado mundiales. No en vano, la innovación burgalesa está presente ya en cerca de cien modelos de tecnologías alternativas como los eléctricos de baterías, los vehículos híbridos enchufables y los impulsados con celdas solares.
La descarbonización y la digitalización están dibujando la movilidad del futuro a través de motores más sostenibles pero también con nuevos diseños y tecnologías en el interior que permitan al usuario acceder a una experiencia más cómoda, digital, segura, fácil y funcional.
En este sentido, Grupo Antolin se está aprovechando de esta transformación al situarse a la vanguardia de las soluciones tecnológicas para el interior del automóvil a través de sus cuatro unidades de negocio: techos, puertas y cockpits; iluminación y sistemas electrónicos.
Lo que comenzó a finales de los años cincuenta en Burgos como un taller que arreglaba vehículos, se ha convertido hoy en referencia indispensable de la industria de automoción española a través de un porfolio de soluciones globales para el vehículo del futuro, que no sólo pasa soluciones más sostenibles, sino también por una digitalización que permitirá al usuario disponer de un interior inteligente concebido para poder trabajar o entretenerse y acceder a una experiencia de viaje radicalmente diferente a lo que hemos conocido hasta ahora.
Así será conducir el coche del futuro
La rápida evolución del mercado automovilístico exige de acciones disruptivas encaminadas a ofrecer soluciones concretas que puedan incorporarse a los vehículos en tiempo real, lo cual implica estrategias empresariales muy enfocadas a la I+D.
Al igual que pasó con la revolución que experimentó el mercado de la telefonía cuando su desarrollo los convirtió en smartphones, Grupo Antolin desarrolla las soluciones del interior de aquello en lo que van a convertirse los vehículos: espacios inteligentes con múltiples funcionalidades que permitirán al usuario sacar un mayor partido a su coche a través del desarrollo de sistemas de iluminación, superficies inteligentes y sistemas electrónicos de última generación. Los vehículos no sólo serán ecológicos sino, además, inteligentes y digitales.
En este sentido, Grupo Antolin, que recientemente ha sido reconocida como la empresa industrial líder en responsabilidad en España según el ranking Merco Responsabilidad ESG, destina para poder ser líder en soluciones tecnológicas para la automoción, un 3% de sus ingresos a I+D+i. No en vano, la multinacional cuenta con centros de innovación en los principales mercados mundiales (Estados Unidos, Alemania, Francia y China), que se coordinan desde los equipos localizados en su sede central en Burgos.
De esta inversión en innovación y desarrollo nacen soluciones de iluminación dinámica que ofrecen distintos escenarios para transmitir al conductor información tanto del propio vehículo como del entorno. La luz puede informar del modo de conducción en los vehículos híbridos, el nivel de carga de la batería o ayudar en temas de seguridad con avisos de alerta al conductor.
Los nuevos modelos de vehículos permitirán detectar si el conductor está cansado o si se distrae al volante, así como adaptar los asientos y el habitáculo en general con una iluminación personalizada. Tecnologías que Antolin está investigando en alianza con la empresa israelí Cipia para adaptarlas perfectamente a la estructura interior del vehículo.
Veremos coches cada vez más ecológicos y digitales, con pantallas que nos permitirán acceder a cualquier contenido multimedia a través de los sistemas de proyección que Grupo Antolin ha desarrollado para el interior el vehículo. Un interior para el que la firma burgalesa ha desarrollado, además, sistemas de purificación de aire así como de esterilización de las superficies para hacerlo seguro frente a epidemias.
El futuro será sostenible, o no será
El Green Deal fija un camino claro: el parque automovilístico, a pesar de ser responsable de sólo el 27% de los gases contaminantes según datos de Faconauto (patronal de los concesionarios en España), debe transformarse hacia uno enfocado en una movilidad cero emisiones antes de 2035, fecha tope en la que dejarán de fabricarse vehículos de combustión fósil. Todos los fabricantes de esta industria están adaptando sus procesos de producción para poder competir en un mercado a medio y largo plazo que dará como resultado el coche del futuro.
Además, la Agenda 2030 marca definitivamente los procesos de producción de las empresas hacia modelos más sostenibles y una economía circular que permita aprovechar los residuos y minimizar el impacto sobre el medioambiente.
En este contexto, Grupo Antolin ha adaptado su estrategia a este nuevo modelo de economía y producción a través del uso de materiales naturales, reciclables, reutilizables y más ligeros.
El año pasado la Compañía lanzó al mercado el primer techo de coche fabricado a partir de residuos plásticos y neumáticos usados. Manteniendo las propiedades de los productos tradicionales en términos de calidad, coste y durabilidad, el techo sostenible emplea materiales reciclados y ofrece, al mismo tiempo, una significativa reducción de peso recortando así las emisiones de CO2 del vehículo.
Para desarrollar estas soluciones, la empresa cuenta con más 1.500 profesionales en todo el mundo vinculados a puestos tecnológicos a través de la ingeniería más moderna aplicada al automóvil.
Los datos de la multinacional burgalesa y a pesar del desafiante contexto en el que opera actualmente esta industria, dan muestra de la solidez de su negocio. Con 140 fábricas en todo el mundo y 26 oficinas comerciales, la firma está presente en 26 países y equipa a más de 580 modelos de vehículos que actualmente están en el mercado, cinco de los cuales son los más vendidos en el mercado.
La Compañía, con 70 años de experiencia en el sector y presidida por Ernesto Antolin y María Helena Antolin, ha basado parte de su crecimiento en una estrategia de innovación que le ha posicionado como líder mundial en la producción de techos y número uno europeo en las soluciones de iluminación del interior del automóvil, por lo que su solidez y experiencia han sido fundamentales para actuar como acelerador de la competitividad del resto de la industria española de componentes para vehículos.