Tengo que reconocer que la habilidad de los inquilinos de la Moncloa para tapar un escándalo con otro dificulta señalar cuál de ellos es el de máxima actualidad, y entre uno y otro bajan el telón de las vacunas, cuyo mérito de distribución corresponde a las CCAA, a pesar de la incapacidad del Gobierno para suministrar las dosis necesarias, y la sospechosa insistencia de la ministra de cambiar la segunda dosis de una vacuna por otra, contra los más básicos fundamentos científicos.

Pero lo prometido es deuda y hoy vamos a hablar de la factura eléctrica, y especialmente de las facturas eléctricas en el ámbito doméstico, pues ya sabemos que la industria española paga la electricidad más cara de Europa, lo que le resta competitividad y ha provocado el cierre de algunas industrias y paralizado inversiones en otras.

En el suministro doméstico las decisiones y explicaciones del Gobierno y particularmente de la ministra Teresa Ribera llamando negacionistas a quienes critican sus últimas decisiones, y la actitud de aquellos que guardan silencio o incluso aplauden sus decisiones, que además se sustentan sobre supuestos falsos, es preocupante.

Una vez más nuestro presimiente está haciendo lo contrario de lo que decía desde la oposición e incluso en plena campaña electoral, pues el Gobierno podría reducir en 24 horas el recibo de la luz en un 13% simplemente con rebajar el IVA de la factura eléctrica, y no mentirnos una vez más diciendo que Europa no nos deja, lo que acaba de desmentir la Comisión, y acreditan países como Portugal (6%), Grecia (6%), Reino Unido (5%), Italia(10%), Francia (5,5%), frente al 21% de España.

De esta forma, el impacto del recibo de la luz en los hogares españoles, (entendiendo por tal el % del importe del recibo sobre los ingresos del hogar) es el 5º más alto de Europa, y todo ello gracias a una factura ininteligible en la que casi el 60% del importe de la misma son impuestos, gracias a los cuales el Estado recauda más de 8.000 millones de euros al año. El truco que defiende nuestra ministra de la transición ecológica de que la compra de derechos de emisión de CO2, y que en un año ha pasado de 19 a 52€, ha encarecido de forma notable la factura. En el tema impositivo en materia eléctrica, el único acierto de este Gobierno fue suprimir el nefasto “impuesto al sol”, para favorecer el autoconsumo.

Con el nuevo sistema, Facua afirma que el recibo medio de la luz ha pasado de 76 a 89€ al mes, en mayo los españoles pagamos la luz más cara de los últimos 32 meses, y el recibo de este mes de mayo ha sido el más caro de la década. ¿Os imagináis que habría ocurrido si esto lo hubiera hecho un gobierno popular?

Y qué decir con el horario tarifario con cinco tramos  al día, en el que obligan a una programación nocturna o festiva de los electrodomésticos cuando ello es posible, sin tener en cuenta las ordenanzas municipales sobre el ruido, y que ha motivado decenas de memes en las redes desde el momento mismo de su aprobación, y que para la vicepresidenta Calvo “el temazo es, no la hora, sino quien pone la lavadora a las 12 de la noche” con ese ramalazo feminista de una ministra para la que el dinero público no es de nadie”.

Como veis, el tema da para mucho y seguro que dará para mucho más. Pero eso sí, los sindicatos calladitos, muy preocupados apoyando el indulto a los golpistas, agradecidos al incremento de un 56% sobre los más de 8 millones de euros que les venía adjudicando el gobierno, pasando a 13. Al menos ellos podrán encender el aire acondicionado de sus sedes este verano para aliviar el tremendo trabajo de sus liberados.

La política de autoconsumo no es nueva:  En el Ayuntamiento de Valladolid hace ya muchos años que iniciamos la instalación de paneles solares en dependencias municipales, (colegios públicos, centros deportivos, Mercaolid, AUVASA, etc.), para ahorrar en la factura eléctrica y recortar gastos. Quienes gobiernan ahora prefieren subir el IBI para cuadrar las cuentas, en lugar de recortar el gasto corriente, dentro de la ortodoxia progresista.

PD. Terminado de escribir cuanto antecede, hoy nos enteramos de que los miembros podemitas del Gobierno cuestionan el horario de la nueva tarificación eléctrica, y proponen adelantar la hora valle a las 10 de la noche. Algo es algo... pero veremos en qué acaba todo.

Hasta el viernes que viene.