Europa mantendrá encuentros en la Comunidad por los ataques de lobo

La Comisión Europa celebrará encuentros en Castilla y León con ganaderos, conservacionistas y otros agentes implicados en la problemática de los ataques de lobos al ganado para buscar soluciones "en el terreno".

Así lo ha señalado el consejero castellanoleonés de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, tras reunirse este lunes con el director general de Medio Ambiente de la UE, Daniel Calleja, para analizar el Plan de Acción para la naturaleza, las personas y la economía y la gestión del lobo al sur de Duero en Castilla y León.

En declaraciones recogidas por Europa Press, Suárez-Quiñones se ha mostrado satisfecho por el resultado de la reunión, de la que ha salido el compromiso de celebrar en las próximas "dos o tres semanas" un encuentro técnico a tres bandas en Bruselas al que acudirán representantes de la Unión Europa, del Gobierno de España y de la Junta de Castilla y León y del que saldría una "hoja de ruta" para llegar hasta las reuniones "en el territorio".

El consejero ha evitado adelantar cuáles podrían ser esas soluciones, las cuales "deberán salir de las distintas reuniones", pero sí ha subrayado que deberán enfocarse hacia lograr una "aplicación práctica" de la actual directiva, ya que la Unión Europea no contempla una modificación de la misma.

Juan Carlos Suárez-Quiñones ha recordado que entre las 15 líneas que se ha fijado la Unión para mejorar la aplicación de las directivas de hábitat y aves, la más importante para Castilla y León es la que señala que éstas "hay que concretarlas en el territorio".

En este sentido, ha aplaudido que la Unión Europea "vaya al territorio" y ha invitado a hacer lo mismo a quienes "desde Madrid" acusan a Castilla y León "de querer matar lobos" sin atender a la problemática que existe.

"Problema de despoblación"

Tras elogiar el "compromiso" de Bruselas con encontrar una solución "al problema de coexistencia del lobo con la ganadería" y "ser parte de esa solución", ha recordado que los ataques de estos cánidos suponen "un problema de despoblación", puesto que "si no se solucionan, los ganaderos se van".

"Es muy fácil hablar de conservación con carácter general desde un despacho, sin pisar el territorio", ha criticado el consejero, quien ha negado que en Castilla y León se desee acabar con esta especie, como demuestra la expansión de ésta desde los 400 ejemplares que quedaban al norte de la Comunidad, hasta los 1.600 detectados en 2013, incluidas zonas donde no encuentran caza en estado salvaje y acuden al ganado extensivo.

Asimismo, Suárez-Quiñones ha recordado que el sistema de pago de indemnizaciones ha pasado de abonar las ayudas en un año a hacerlo en sólo 23 días, aunque eso "no soluciona el problema" derivado del incremento de poblaciones de lobos en la región.