Dos Guardias Civiles que estaban fuera de servicio son protagonistas hoy al salir a la luz que salvaron la vida de un hombre el pasado 19 de junio, sobre las 13:00 horas, en la localidad soriana de Arcos del Jalón. La esposa de uno de ellos también ayudó para que todo terminará en final feliz.

Estos Guardias Civiles paseaban por el mercadillo, que se organiza entre las calles Travesía de Jalón y Calle nueva de dicha localidad; cuando de repente, observaron una aglomeración de personas que formaban círculo alrededor de un hombre que estaba tendido en el suelo, inconsciente, y con síntomas evidentes de asfixia.

Tras identificarse como Guardias Civiles, se hicieron cargo de la situación, y procedieron a separar las mandíbulas, fuertemente contraídas, y abrir sus vías respiratorias, retirando su lengua contraída y, de esta manera, consiguiendo la entrada de aire en los pulmones.

Unos quince minutos después llegaron efectivos sanitarios del Centro de Salud de Arcos de Jalón, quienes procedieron a activar un protocolo de urgencias para este tipo de casos, a la vez que auxiliados por Los Guardias Civiles intervinientes, fue introducido en la ambulancia para ser evacuado al Centro de Salud de la localidad, y posteriormente trasladado al Hospital de Soria, y dada la gravedad del ataque sufrido, finalmente fue trasladado al Hospital de Burgos.

Los agentes actuantes han recibido formación por la Comandancia de la Guardia Civil de Soria en la utilización y manejo del desfibrilador externo semiautomático (DESA), y soporte vital básico, que incluyen técnicas de reanimación cardiopulmonar.

Con esta rápida intervención y sin dilaciones, tanto los Guardias Civiles actuantes como la esposa de uno de ellos, evitaron un fatal desenlace, demostrado la permanente disposición para el servicio, de la “Benemérita” Institución a la que pertenecen.