Los once componentes del rito pagano Los Carochos tienen todo listo para salir a las calles de Riofrío de Aliste el próximo 1 de enero, una manifestación tradicional que cumple ahora 45 años desde que, a principios de la década de los 70 del siglo pasado, los jóvenes de la localidad que ahora peinan canas, recuperaron esta mascarada tras estar un periodo de tiempo interrumpida.

La obisparra de esta localidad alistana romperá con la tranquilidad del pueblo cuando los personajes distribuidos en grupos –diablos, gitanos o guapos- hagan su aparición al mediodía del Año Nuevo con sus llamativos atuendos y la participación directa de los habitantes del lugar.

Durante toda la jornada, después de diferentes situaciones en la plaza del Sagrao donde intercambiarán acciones con el público y entre ellos mismos, pedirán el aguinaldo casa a casa. La fiesta se remonta a siglos atrás, aunque no hay constatación escrita sobre su origen exacto si bien los estudiosos la sitúan en la época romana.

El original vestuario compuesto de vivos colores, la estrafalaria vestimenta y la labia desmedida del gitano, además del voluminoso traje de papeles de la Filandorra, así como la imagen de negro rabioso de los dos protagonistas envueltos en humo hacen de esta tradición una de las mascaradas más atractivas de Zamora. Una provincia que junto a la región de Trás-os-Montes concentra el mayor número de fiestas de invierno de toda la Península Ibérica.

Otro de los aspectos más sobresalientes de esta celebración festiva, como en el resto de rituales, es su rica simbología. Enmarcada dentro del llamado ciclo de los 12 días, que va del 26 de diciembre a Reyes, custodia la magia benéfica que representan los misteriosos seres que son los enmascarados en ámbito rural.

Los Carochos, como otras manifestaciones similares, guarda una secreta relación con el cambio del ciclo agrario, el despertar del campo, la variación de la luz solar,  el paso de los jóvenes a la vida adulta, la fertilidad y, por añadidura, la crítica social.

La celebración de Los Carochos 2018 vienen acompañada, un año más, de la publicación del mismo nombre que trae a debate asuntos como la incorporación de la mujer a estos ritos masculinos, la música tanto de ese día en Riofrío como de toda la comarca alistana o la próxima grabación del rito en 3D, a iniciativa del Museo Etnográfico de Castilla y León.

Además, el programa Agrosfera de la2 de TVE acaba de emitir el pasado 23 de diciembre un reportaje sobre los preparativos de este y otros rituales que tienen lugar el mismo día en otros pueblos pertenecientes al Ayuntamiento de Riofrío. Se trata de Los Diablos, en Sarracín, y Los Cencerrones, en Abejera, junto a Los Carochos, convirtiéndose de este modo en la concentración más importante de mascaradas en España, al desarrollarse en apenas 6 kilómetros.