real valladolid osasuna zorrilla 27

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Región

Apoteosis del Valladolid para viajar hasta el playoff

3 junio, 2018 15:09

El Real Valladolid ha mostrado su mejor cara para tumbar a Osasuna y no dar pie a un sinsabor en la fiesta vivida en el estadio Zorrilla. Los goles de Herías de libre directo y de Mata de penalti, uno en cada tiempo, han servido para doblegar al Osasuna, que acabó el partido con 10 jugadores y con gran impotencia ante la seriedad y solidez del Pucela.

Comenzó el partido marcado por el ambiente de las citas grandes en Zorrilla. La afición respondió a la llamada del club, con una afluencia masiva a los exteriores del estadio para brindar un recibimiento memorable al equipo. Después, con las gradas prácticamente llenas, la afición blanquivioleta fue determinante para elevar el entusiasmo de los jugadores y alentarles en el esfuerzo.

La primera ocasión fue un libre directo que Michel estrelló contra la barrera en el minuto 13. Pero la pauta del ataque local estaba clara, buscar al hombre que había marcado 32 goles y llevaba dos partidos sin hacerlo. La estadística caía por su propio peso. 

Precisamente fue Mata el que remató en el minuto 19 un centro de Nacho, pero el balón fue desviado fuera. En el minuto 30 Hervías cambió la cara al partido, con la ejecución magistral de un libre directo que superó al portero de Osasuna y abrió el marcador.

Tres minutos después de la reanudación, Toni protagonizó una de las jugadas del partido, desbordando desde banda izquierda combinando varios regates hasta adentrarse en él área, donde el forcejeo con la defensa terminó con Toni en el suelo y los 22.280 espectadores de Zorrilla pidiendo penalti.

Cedió el Valladolid el control territorial a Osasuna, con la única alternativa ofensiva de colgar balones largos en busca de Mata. Eran los peores minutos del Valladolid en el partido. Entonces llegó el minuto 60, ese que sirve de punto de giro en innumerables partidos. Lillo derribó a Mata cuando el delantero intentaba rematar el centro de Hervías y el árbitro señaló penalti y la expulsión del visitante. El ambiente estaba caldeado y el portero de Osasuna vio tarjeta amarilla por molestar cuando Mata intentaba poner el balón en el césped para ejecutar la pena máxima.

No falló el delantero y pichichi de récord de esta temporada y logró su gol 33 de la campaña. La celebración acalorada dentro de la portería elevó aún más la tensión y provocó que la celebración de Mata se viviera en medio de un carrusel de empujones.

En el minuto 70 salió Ontiveros por Toni, que se llevó una gran ovación, y en la primera jugada su conexión con Mata a punto estuvo de dilapidar el partido. Con Osasuna volcado al ataque el partido se rompió, y dos minutos después llegó otra nueva ocasión, con Mata conduciendo y buscando a Plano en el segundo palo, pero no llegó a conectar el remate.

Osasuna tuvo la más clara en un potente remate de Xisco de cabeza a centro de Rober pero se fue por encima de la portería de Masip. Tras perdonar una nueva ocasión el Valladolid, el protagonista volvió a ser el portero local, con un paradón abajo en el que se jugó el físico y sufrió un duro golpe contra el poste.

En los minutos finales el Pucela supo jugar con cabeza y no permitir que el caos fundiera el esfuerzo realizado durante todo el partido y no dio opción a Osasuna de tener opciones de empatar. Ahora, espera el Sporting de Gijón en la primera eliminatoria por el ascenso, el jueves en Zorrilla y el domingo en el Molinón.