Ha sido un buen año para el deporte de Valladolid, con más alegrías que decepciones y con la guinda que el pasado fin de semana puso el Pucela con ese ascenso a la categoría máxima del fútbol español tras superar en la final al C.D. Numancia, tras el 0-3 de la ida y el 1-1 de la vuelta.

El conjunto de Sergio demostró que era el que mejor llegaba al Playoff de los cuatro aspirantes para confirmar su vuelta a Primera después de cuatro años de travesía por el desierto y de momentos muy duros en los que la afición se ha vuelto contra el palco pidiendo la cabeza de un presidente, Carlos Suárez, que ahora duda entre si continuar o vender.

El baloncesto, con el Carramimbre Ciudad de Valladolid a la cabeza, también ha firmado una temporada de ensueño tras su ascenso a la LEB Oro. Los de Paco García consiguieron cumplir con su objetivo, salvar la categoría, muy pronto y se metieron incluso en la fase de ascenso, pero CB Prat cortó las aspiraciones de las ardillas.

El balonmano también ha firmado un gran año. Por un lado el Atlético Valladolid ha terminado esta campaña en la novena posición tras un año en el que Nacho González comenzó liderando al equipo desde la banqueta y acabó David Pisonero como nuevo mister. Con presencia copera, de nuevo, pero con la mala suerte de tener que enfrentarse a un gran F.C. Barcelona en la primera ronda.

Lo mismo le pasó a un Aula Alimentos de Valladolid en el tornero del KO, donde se las tuvo que ver ante el Bera Bera, cayendo a las primeras de cambio pese a la gran primera mitad de ese encuentro. Sin embargo, las de Miguel Ángel Peñas han firmado una gran temporada acabando cuartas en la tabla clasificatoria.

En lo que el rugby se refiere, Valladolid es sin lugar a dudas la gran potencia a nivel nacional con un VRAC Quesos Entrepinares que ha ganado Liga y Copa ante El Salvador volviendo a demostrar la supremacía del oval pucelano.

En hockey, con el CPLV las cosas han ido sumamente bien. Los chicos se han adjudicado la Liga y también la Copa en casa tras un final de temporada épico, mientras que las chicas se han convertido en las reinas de Europa.

Hay que mencionar también a un BSR Valladolid, en baloncesto adaptado, que aunque no ha tenido su mejor año suma ni más ni menos que 22 temporadas ininterrumpidas en la máxima categoría de este deporte.

El fútbol base tanto masculino, con la salvación del Real Valladolid B, y el femenino, con el buen hacer del C.D. Parquesol también son dignos de mencionar como seguro que muchos otros que se nos quedan en el tintero… waterpolo, gimnasia, etc.

El deporte pucelano vuelve a respirar y a mostrar su mejor versión en un año de ensueño no solo a nivel de élite, sino también en lo que a la base y al escolar se refiere, donde cada vez son más los pequeños que se animan para participar en su disciplina favorita.