Francia gana con eficacia su segunda estrella en el pecho
Veinte años después, Francia ha repetido la historia y ha logrado ganar la Copa del Mundo de fútbol, al imponerse por 4 a 2 a Croacia en una final en la que su contundencia y eficacia ofensiva le sirvieron una victoria clara. El conjunto entrenado por Deschamps, que ya ganó como jugador el Mundial de 1998, ha aprovechado su velocidad en la transición ofensiva y la calidad de su juego de ataque para superar a una Croacia que dominó la posesión.
Comenzó Croacia mostrando el gran nivel de juego que ha exhibido durante todo el torneo, dominando de manera muy clara la posesión y gozando de las primeras ocasiones de peligro. Sin embargo, fue Francia quien golpeó primero, con una falta lanzada por Griezmann en el minuto 18 que Mandzukic intentó despejar pero terminó convertido en gol en propia puerta.
No desistió Croacia de su plan de partido y continuó el acecho al área francesa, logrando el premio del empate diez minutos después, cuando Perisic culminó una gran jugada de estrategia a balón parado con un potente disparo.
La jugada polémica del partido llegó en el minuto 38, cuando en un saque de córner, el balón impactó en la mano de Perisic. El árbitro en un primer momento no apreció penalti pero tras la revisión del VAR señaló la pena máxima y Griezmann engañó a Subasic y volvió a adelantar a los ‘bleus’.
Ese segundo gol enfrió el entusiasmo croata y supuso un duro golpe antes del descanso. Tras la reanudación Croacia recuperó parte de su efusividad ofensiva. Sin embargo, los croatas no lograron recuperar la igualdad del marcador y fue Francia de nuevo quien marcó, esta vez gracias a Pogba en el minuto 59, que recibió la pelota en la frontal tras un rechace y disparó con potencia para batir a Subasic.
Con el 3-1 Croacia vivió sus peores momentos en el partido. Con el rival noqueado, Francia supo aprovechar la coyuntura y sentenciar la final en el minuto 65, cuando Lucas Hernández encontró a Mbappé en la frontal y éste superó a Subasic con un disparo seco ajustado al palo.
El partido parecía muerto y así estuvo durante unos minutos, hasta que en el 69 Lloris cometió un error incomprensible, al tratar de eludir a Mandzukic dentro del área pequeña, pero el delantero consiguió interponerse en el intento de pase y marcar el segundo para su selección.
Lo siguió intentando Croacia sin desistir hasta el final del partido, pero el marcador ya no se movería y dejaría el claro 4 a 2 para que Francia colocara su segunda estrella en el pecho.