La Audiencia Provincial de Salamanca iba a juzgar este viernes a un hombre de 38 años de origen venezolano pero ya con nacionalidad española, U.C.Z., como presunto autor de un delito de asesinato en tentativa. Se enfrentaba a once años de cárcel y casi 15.000 euros de indemnización, pero acusación y defensa han llegado a un acuerdo para que la condena quede en cinco años de prisión al tener en cuenta algunos atenuantes.

Los hechos se produjeron en agosto de 2015, cuando un joven ecuatoriano se encontraba en un local de fiesta nocturna en la calle Pedro Cojos. Era el ex novio de la pareja del imputado, con quien meses antes ya había mantenido una pelea que terminó en juicio y condena para ambos por lesiones.

Los celos le carcomían y aquella madrugada U.C.Z. se acercó hasta la víctima por la espalda y le agredió con un cuchillo de 17 centímetros de hora, una de las heridas por detrás y otras tres de frente, cuando la víctima intentó quitarle el arma. Las cuchilladas hubieran continuado de no ser por la intervención de un camarero.

El agresor huyó del lugar pero horas después se presentó en la Comisaría de Salamanca con su abogado, donde fue detenido. Mientras, la víctima pudo salvar su vida tras deambular hasta la Gran Vía y ser trasladado al hospital, donde estuvo más de un mes ingresado, y casi tres recuperándose de las heridas.