El turismo rural sigue siendo atractivo en Castilla y León
Castilla y León ha sido relegada por Andalucía y Baleares al tercer puesto como destino preferido en los alojamientos de turismo rural con un total de 185.953 pernoctaciones en el mes de julio, lo que representa un incremento del 1,78 por ciento por encima del dato nacional, que se mantiene invariable, según la Encuesta de Ocupación en Alojamientos Turísticos emitida por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y recogida por Europa Press.
Estas cifras relegan a Castilla y León a esa tercera posición en número de pernoctaciones en julio pero se mantiene como la comunidad con el mayor porcentaje nacional de viajeros españoles (16,7 por ciento).
Además, el pasado mes un total de 78.354 viajeros pasó por los alojamientos de turismo rural existentes en Castilla y León (-0,08 por ciento en comparación con julio de 2017) de los que 70.483 eran residentes en España y 7.871 en el extranjero.
Según la misma Encuesta de Ocupación en Alojamientos Turísticos, la estancia media en los establecimientos rurales de Castilla y León a lo largo del mes de julio fue de 2,37 días, de nuevo por debajo de la media nacional (3,20 días).
Respecto al número de alojamientos abiertos en Castilla y León en julio ascendió a 3.703 (17.613 en España), con 32.861 plazas estimadas (172.253 en todo el país) y el personal empleado ascendió a 5.166 (27.143 en el país). De este modo, Castilla y León se mantiene en la comunidad que más personas emplea en turismo rural, seguida de lejos por Andalucía (3.477), Baleares (3.001) y Cataluña (2.654).
Por su parte, el grado de ocupación en los establecimientos rurales de la Región fue del 18,21 por ciento por plazas (28,70 en el resto de España), 38,42 por ciento en cuanto a las plazas en fin de semana (44,53 por ciento como media nacional) mientras que por habitaciones la ocupación se situó en el 22,85 por ciento, frente al 34,54 del resto del país.
El grado de ocupación más elevado correspondió a Baleares, con un 62,54 por ciento de las plazas ocupadas en julio. Por fines de semana, la más ocupada fue también Baleares, con un 67,22 por ciento, seguida de País Vasco (62,76 por ciento) y La Rioja (55,55 por ciento).
Cinco provincias entre las 15 con más pernoctaciones
Entre las quince provincias con un mayor número de pernoctaciones en establecimientos rurales durante el mes de julio se encuentran Ávila (39.074 pernoctaciones y quinto puesto en el ranking); Burgos (24.640 pernoctaciones y noveno puesto); Salamanca (23.226 pernoctaciones y undécimo puesto); León (23.031 pernoctaciones y puesto número doce) y Segovia (21.533 pernoctaciones y puesto número trece).
La estancia media en estas cinco provincias fue de 2,54; 2,43; 2,32; 2,29 y 2,22 días, respectivamente. En cuanto al número de viajeros, los establecimientos rurales de estas provincias recibieron la visita de 15.408; 10.161; 10.001; 10.059 y 9.701 personas, respectivamente.
En Ávila había abiertos en julio de 2018 un total de 811 establecimientos rurales con un número de plazas estimadas de 6.342 y 1.051 personas empleadas mientras que Burgos contaba con 411 establecimientos de turismo rural abiertos con capacidad de 4.028 plazas y 515 puestos de trabajo creados.
Por su parte, en Salamanca había abiertos en el mes de julio un total de 526 establecimientos rurales con un número de plazas estimadas de 4.431 y 688 personas empleadas y 490 en León con 3.931 plazas y 704 empleos.
Finalmente, en Segovia había abiertos 470 establecimientos rurales con un número de plazas estimadas de 4.348 y 621 personas empleadas.
Por procedencia, Madrid fue la comunidad que aportó más viajeros a la comunidad castellanoleonesa en julio (43,31 por ciento), seguida de Castilla y León (14,45 por ciento) y País Vasco (7,79 por ciento).
Las viajeros españoles que más pernoctaron en los alojamientos de turismo rural de Castilla y León durante el mes de julio también fueron los madrileños (42,09 por ciento), seguidos de los castellanoleoneses (13,41 por ciento) y los vascos (7,70 por ciento).
Por su parte, los precios de los alojamientos de turismo rural aumentaron un 0,79 por ciento en julio, hasta un índice del 132,61 (144,47 en España), frente a un incremento del 2,04 por ciento en el resto del país.