Castilla y León

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Salamanca tiene un mercado laboral más temporal y precario

5 septiembre, 2018 11:14

El Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social publicó este martes los datos del paro correspondientes a agosto, con 2.197 desempleados menos en la lista de la provincia de Salamanca y 2.764 afiliados más a la Seguridad Social respecto al año pasado, comparaciones que se efectúan para determinar si se ha creado o no empleo. Son datos positivos, pero un análisis exhaustivo deja una letra pequeña negativa.

La capital charra continúa en la zona media de provincias de España donde más desciende la lista del paro, un 8,9%, respecto al año pasado, la duodécima que más lo hace. Los datos son similares a los del año 2009, pero hay que tener en cuenta que desde entonces la provincia charra cuenta con 25.000 habitantes menos, unos dos mil ochocientos sólo en el último año, la mayoría jóvenes exiliados a otras zonas de España e incluso al extranjero en busca de trabajo. Y es que la afiliación de la Seguridad Social es similar a la del año 2010, como puede verse en el gráfico adjunto. Salamanca es la vigésimo cuarta provincia donde menos aumenta la cifra de ocupados, con un 2,3%. Por tanto, se aleja del ‘top ten’.

Estas cifras se obtienen a través de una enorme rotación laboral y sobre todo precarización del mercado de trabajo. El mes pasado se rubricaron 10.971 contratos, pero la afiliación a la Seguridad Social descendió en 154 personas respecto al mes anterior. Es decir, que mientras se firmaban 71 contratos se destruía un empleo. De hecho, más de la mitad de los contratos se hizo sólo por días o incluso horas de duración.

Se generan más contratos que el año pasado, cuatro mil en el cómputo hasta agosto, pero por esa rotación del mismo nicho de empleados. Así, se mantienen los parados de larga duración, que cada vez encuentran menos oportunidades para poder regresar a un mercado laboral muy acotado en determinados sectores económicos. De hecho, el 20% de los desempleados tiene una antigüedad superior a los cuatro años y la mayoría supera los 50 años.

Estos contrastes se justifican porque el mercado laboral todavía está marcado por los contratos temporales e inferiores a mileurista. La letra pequeña de los datos del paro hechos públicos por el Ministerio de Trabajo muestra que así ocurre con noventa y dos de cada cien nuevos contratos (8,6% de indefinidos). Aunque es un dato mejor que el año pasado, cuando los indefinidos eran el 8,1%.

Menos perceptores de prestaciones por desempleo

Los parados salmantinos cobran la vigésimo segunda prestación por desempleo más baja del país, con una media de 757 euros, siete menos que el año pasado, según los últimos datos hechos públicos por el Ministerio. En concreto, 10.222 parados pueden cobrar una prestación por desempleo en Salamanca, setecientos menos que hace un año, lo que supone que en torno a la mitad de los desempleados carece de este tipo de ingresos. Y quienes tienen derecho a una prestación, la media es de apenas un trimestre.

Y es que según han pasado los años este derecho se ha ido recortando, en cantidad por la mayor temporalidad de los contratos, y por tanto, al haber trabajadores menos tiempo, cuando concluye su periodo de labor no llegan a tener derecho a una prestación. Además, como los salarios son cada vez más bajos, quienes llegan a cobrar algo ingresan menos dinero.

Destrucción de empleo en la administración pública

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, considera que estos datos ponen de manifiesto el carácter estacional y las debilidades del mercado de trabajo, también en las administraciones públicas. De hecho, los últimos datos de la Encuesta de Población Activa muestran que los contratos interinos suponen ya un 14 por ciento de todo el empleo público.

Por este motivo, CSIF emplaza al Gobierno a continuar las negociaciones a la vuelta de las vacaciones, para analizar estos datos de precariedad y otras cuestiones pendientes en materia de retribuciones y condiciones laborales (35 horas, conciliación, permisos de paternidad y maternidad equiparables e independientes…).