El Gobierno acaba de difundir el ‘Boletín estadístico del personal al servicio de las Administraciones Públicas’, actualizado a enero de 2018, que muestra que la plantilla de funcionarios se recupera ligeramente en la provincia de Salamanca aunque lejos de alcanzar los puestos de trabajo perdidos durante la crisis.

En concreto, hay 23.620 empleados públicos, dos mil menos que antes de estallar la recesión económica, pero doscientos más que el semestre anterior, enlazando dos al alza por primera vez en una década. Como puede apreciarse en el gráfico adjunto, el inicio de la recesión no se notó en las plantillas de funcionarios, que se dispararon hasta 2010, pero entonces vino un drástico recorte del que no terminan de recuperarse las administraciones públicas, sobre todo por la nula tasa de reposición de las jubilaciones.

En concreto, en Salamanca hay 4.749 trabajadores dependientes del Gobierno (casi medio centenar más que el semestre anterior), 10.938 de la Junta de Castilla y León (veinticinco más), 4.866 de ayuntamientos (cuarenta más) y 3.067 de la Universidad de Salamanca (un centenar más).

En lo que respecta al Gobierno, 1.060 son trabajadores de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado (un centenar más), 1.546 de las Fuerzas Armadas (una treintena menos) y 431 de Juzgados (diecisiete menos).

De la Junta de Castilla y León, 1.884 dependen de consejerías (una veintena menos), 4.082 de educación no universitaria (sesenta más) y 4.972 de hospitales y centros de salud (dieciocho menos).

En lo que respecta a la Universidad de Salamanca, 2.026 son Personal Docente e Investigador (PDI) y 1.041 son Personal de Administración y Servicios (PAS), aumentando la plantilla en ambas categorías respecto a mediados del año 2017.