Castilla y León

Castilla y León

Región

Un viaje a las luces y sombras del Madrid de los 80

9 marzo, 2019 21:11

Madrid, década de 1980; la Movida, la Transición, el despertar de un país, cultura en ebullición, bares, música, cine… y un asesino. Es el punto de partida de ‘El caso del asesino del fotograma y la chica con el tatuaje en la muñeca’, el segundo libro publicado por los vallisoletanos Javier García y Rodrigo Reglero, que han explicado en una entrevista con NoticiasCyL los secretos de esta novela y las peculiaridades de “escribir a cuatro manos”.

La primera pregunta es obligada y no por previsible resulta menos curiosa. “Con el título buscábamos que llamara la atención, además nos ahorra el prólogo”, bromea Reglero sobre la denominación de la novela, que recuerda a los títulos de la célebre trilogía Millennium de Stieg Larson (‘La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina’). “No sólo el título, buscábamos algo llamativo con toda la portada, porque creo que hemos conseguido un diseño muy vistoso y es importante, porque al final todo lo que nos entra por los ojos influye”, apostilla García.

En aquel momento de la década de los 80 del siglo pasado transcurre esta historia “con personajes que transitan por un fino hilo entre las luces y sombras que había en ese momento”, explica Rodrigo Reglero. “Nos gustaba Madrid para ambientar la novela y esa época en concreto porque nos permitía incorporar mucha música en el libro con protagonismo, al igual que el cine, nos daba mucho juego también por los bares, escenarios como el Retiro que nos gustaban; hemos recorrido Madrid con una idea clara de dónde queríamos que fueran las localizaciones de la historia y también hemos descubierto otra visión de la ciudad”, señala García.

Estos dos vallisoletanos son ávidos lectores que se han ido empapando durante su vida de multitud de autores y estilos, desde ‘Elige tu aventura’ en la infancia hasta Dolores Redondo o Pérez Gellida, pasando por imprescindibles como García Márquez o Delibes. “Nunca hemos buscado imitar o acercarnos al estilo de nadie, al final el nuestro es propio y se va creando con todo lo que hemos leído, porque siempre me ha encantado Tolkien pero está muy lejos de esta historia por ejemplo”, apunta Rodrigo, que precisa que “nosotros mismos tenemos estilos diferentes, Javi es mucho más crudo, más real, a mi me tira más lo onírico, ahí nos vamos compensando”.

Lo que sí buscaron fue que la historia narrada resultara plausible. “Un amigo que es policía revisó la parte relacionada con la investigación, para que tuviera veracidad y fuera consistente”, recuerda Javier García.

Escribir a cuatro manos

“Somos amigos de toda la vida, nos entendemos bien y tenemos una idea común de lo que queríamos hacer con la novela”, recuerda Reglero sobre el proceso de escribir conjuntamente entre dos personas. “Nos distribuíamos el trabajo en base a la estructura de la novela, nos juntábamos y fusionábamos lo que habíamos realizado por separado”, añade Javier.

Este ha sido el segundo libro que ambos publican, el primero era una historia muy diferente. Rodrigo Reglero detalla que “en la otra novela contamos la historia de mi familia, remontándonos al momento en que mi tatarabuelo tuvo que ir a Santander a hacer la mili, eso le cambió la vida, dejó atrás a su familia, su prometida… y construyó otra vida, conoció a otra mujer, le cambió la vida. Hay tres tramas, ese origen y después sus hijos y sus nietos, con todo el contexto histórico que les tocó vivir, como la Guerra Civil”.

García apunta que el objetivo “no era hacer un libro sobre la Guerra Civil, es una historia familiar y cercana porque en todas las familias hay historias similares, pero toca el conflicto de soslayo, es el telón de fondo de una trama familiar”

Ese vínculo con Santander llevará a los dos autores a realizar una presentación allí en abril, después de los actos que ya realizaron en Laguna y la librería Oletum.

Futuro

En una buena mente creativa nunca faltan los proyectos. “Siempre estamos con ideas en la cabeza, escribiendo. Nos gustó la experiencia de la primera novela y queríamos seguir, ver el trabajo publicado es una gran satisfacción; ahora esta historia está concebida como una trilogía, así que seguiremos con la segunda y tercera parte”, apunta Javier García.

“Aún no se puede decir nada”, bromean, “pero creemos que el final va a gustar y la gente tendrá ganas de leer más”.