Samantha, Jordi y Pepe ya graban a los pies de la Catedral de Zamora. El equipo de Televisión Española iniciaba esta mañana las grabaciones de la nueva temporada de 'Master Chef' en la capital.

Aunque la jornada de rodaje se lleva con gran secretismo y con fuertes medidas de seguridad para que los curiosos no puedan ver cómo se va a desarrollar el programa en Zamora, los tres presentadores y cocineros si han desvelado que las pruebas a los aspirantes a chef se realizarán con productos de Zamora, adscritos a la marca 'Tierra de Sabor'. Aunque, como ha asegurado el cocinero Jordi Cruz "haremos una reinvención de su uso habitual, porque es parte de la esencia del problema, innovar con la cocina y poner retos a los aspirantes".

Y sobre la rica gastronomía zamorana los afamados cocineros han reconocido que, pese haber llegado ayer por la tarde-noche, "ya nos hemos informado de dónde probar buenos platos típicos e ir de pinchos". De hecho, Samantha Vallejo-Nájera ha desvelado que tiene "muchísimas ganas" de probar el arroz a la zamorana, ya que "nunca había visitado Zamora". Cosa que si ha había hecho con anterioridad Pepe Rodríguez, que relataba como había recorrido "varios rincones de la provincia y restaurantes de algunas zonas zamoranas".

El programa se está grabando en una de la joya del románico de la ciudad, la Catedral de Zamora, del que también han dado cuenta los ahora presentadores del concurso. "Tenemos grabado a fuego que la ciudad tiene 22 iglesias en total", reconocía entre risas la chef española. Por su parte, el gerente de El Bohío ha destacado de Zamora que es una ciudad "cómoda y con gran riqueza artística".

Las novedades de esta nueva edición de Master Chef

Uno de los grandes cambios del programa culinario es la ausencia de la presentadora andaluza Eva González, y sobre ello, Pepe Rodríguez ha reconocido que "siempre la echaremos de menos, pero no supone una diferencia abismal". En esta nueva edición, los tres chef ejercen de presentadores a parte de jueces, y para todos ellos supone "una forma más emocionante de llevar el concurso, porque nos permite una interacción más directa con los aspirante, que les mete más presión y le da dinamismo al programa".

Por último, los televisivos cocineros han dado cuenta de "la buena salud" de este formato, ya que, como explicaba Jordi Cruz "la innovación gastronómica es inagotable, por lo que siempre hay posibilidad de crear nuevas pruebas y retos".