Un total de 12.463 personas se han presentado a las oposiciones de maestros que se celebran hoy en la Comunidad con "nervios" en las horas previas y con la esperanza de que el sistema vire hacia una prueba "más objetiva".
Desde primera hora de la mañana, los aspirantes se enfrentan en Burgos (Primaria), León (Inglés), Salamanca (Infantil), Valladolid (Pedagogía y Terapéutica), Palencia (Educación Física), Soria (Audición y Lenguaje) y Ávila (Música) a las diferentes pruebas.
En juego hay 1.026 plazas que se reparten en siete especialidades --287 de Primaria, 204 de Inglés, 185 de Infantil, 123 de Pedagogía y Terapéutica, 103 de Educación Física, 72 de Audición y Lenguaje y 52 de Música-- y de ellas, 103 estarán reservadas para personas con discapacidad --29 en Primaria, 21 en Inglés, 19 en Infantil, doce en Pedagogía y Terapéutica, diez para Educación Física, siete para Audición y Lenguaje y cinco para Música--.
Entre los opositores, la vallisoletana Rocío Descalzo afronta las de Primaria en Burgos, con "nervios" por el resultado, pero con la "tranquilidad" de llevar una "buena preparación". "Estoy contenta porque creo que llego bien al examen", señalaba a Europa Press poco antes de enfrentarse a la prueba.
Descalzo ha explicado que el factor "suerte" juega un papel "fundamental" por lo que cree que el sistema debería ser "más global" sin pruebas "eliminatorias". "Puedes ser un gran docente y quedarte en el camino", ha insistido, para lamentar que las plazas siguen "siendo escasas" después de no haberse convocado una oposición desde 2016.
"Lo bueno de estas oposiciones es que también se han convocado en otras autonomías y eso hace que se repartan más los aspirantes", ha explicado.
Unos argumentos que comparte la segoviana Ana Vela que se examina en Salamanca para optar a una de las 185 plazas de Infantil. "El sistema de oposición debería de basarse en criterios más objetivos", explica la docente que demanda un "mayor número" de plazas como sucedía "antes de 2009".
Vela ha lamentado que cada vez se hagan "menos llamamientos" desde la lista de interinos --ella ha trabajado solo una vez en los últimos tres años--, una situación que "imposibilita coger puntos" para acceder a la prueba con "más puntos y opciones para lograr una plaza", ha concluido.
El proceso selectivo constará de dos pruebas eliminatorias estructuradas en dos partes cada una. La primera evaluará conocimientos específicos de la especialidad mediante una prueba escrita de un supuesto y el desarrollo de un tema elegido por el participante. La segunda examinará la aptitud pedagógica a través de la presentación y defensa de la programación y la preparación y exposición de una unidad didáctica.
A la hora de puntuar, un 60 por ciento de la nota corresponderá a la fase de oposición y el otro 40 a la de concurso. Los aspirantes cuya puntuación global tenga un número de orden igual o menor que el número de plazas convocadas en la correspondiente especialidad superarán el proceso, en tanto que aquellas plazas reservadas para discapacitados que no se cubran se acumularán para el turno libre.