El magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, ha defendido este viernes la idea de que "los jueces pueden tener opinión pero no pueden ser correa de transmisión de un partido político", frente a las voces que apuntan en la dirección contraria.
El juez Llarena ha participado en Burgos en un diálogo con el vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), José María Macías, enmarcado dentro del acto conmemorativo del trigésimo aniversario del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL).
Llarena ha hecho alusión, por otro lado, a su papel en la cuestión de Cataluña al señalar que, pese al cúmulo de circunstancias, ha habido momentos "fabulosos" y ha mostrado su satisfacción por haber formado parte de este proceso tan relevante en la reciente historia de España.
Por otro lado, ha puesto en valor la carrera judicial, de la que ha dicho que siempre ha sido vocacional, aunque puedan existir otros parámetros para adoptar la decisión, a la vez que ha dicho que hay que ser más ambicioso en este sentido.
El magistrado ha hecho alusión en su intervención, además, a las dificultades económicas a las que la carrera judicial se ha enfrentado desde hace años y ha explicado que desde 1990, se han registrado tres anualidades con una subida de salario por encima del IPC, llegándose en algún ejercicio incluso a bajar.
Desde la llegada de la democracia, ha dicho Llarena, la administración de justicia no ha cambiado en exceso pese al "aluvión" de trabajo que recae en los jueces, que según ha matizado es "enorme", y todo ello mientras el prestigio de la carrera judicial ha menguado y el reconocimiento que se dispensa a los jueces no es el mismo.
Por su parte, el vocal del Consejo General del Poder Judicial, José María Macías, quien ha traslado al juez Llarena diferentes preguntas, ha señalado que la carrera judicial ha cambiado "algo" en los últimos años y ha pedido una reflexión para analizar si ese cambio ha sido para bien o para mal.
El acto ha comenzado con un diálogo entre el vocal del Consejo General del Poder Judicial, José María Macías, y el magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo, Pablo Llarena.
A continuación, ha intervenido el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, José Luis Concepción, quien ha realizado un breve repaso de la historia del Alto Tribunal de la Comunidad.
Concepción ha hecho entrega, además, del Premio Justicia Castilla y León, galardón creado con motivo de este aniversario, a Feliciano Trebolle, recientemente jubilado, para poner en valor sus méritos y trayectoria profesional.
En el acto de celebración del trigésimo aniversario del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León han participado también el presidente de la Diputación de Burgos, César Rico; el delegado territorial de la Junta, Roberto Saiz; el arzobispo de Burgos, Fidel Herráez; y el presidente de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Burgos (FAE), Miguel Ángel Benavente.