La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha valorado hoy el anuncio de adelanto electoral en Castilla y León y la destitución de todos los consejeros de Ciudadanos en el gobierno regional. La líder naranja ha sido clara: "Me da muchísima pena que al final Mañueco haya cedido a las presiones de Génova. Casado necesita una victoria que tape lo de Ayuso en su guerra interna y al final han cogido un mapa de España y han elegido Castilla y León para su juego de poder".
Y es que para Arrimadas, el pacto en Castilla y León había dado como resultado "un gobierno que funcionaba", y ha querido hacer un reconocimiento a "todos los compañeros de Castilla y León", especialmente al vicepresidente Igea y al resto de consejeros que han hecho "una labor magnífica". A su juicio, la labor de Ciudadanos en esta Comunidad Autónoma demuestra que "se puede hacer un partido de centro y dar estabilidad a Castilla y León".
La noticia ha sorprendido sobremanera a Inés Arrimadas, quien ayer mismo mantenía una conversación con el presidente Mañueco en la que "para nada se vislumbró esto, de hecho estábamos hablando de sacar adelante los presupuestos, de la próxima la conferencia de presidentes...".
"Mis padres, mis abuelos, todos son originarios de Salamanca y creo que los ciudadanos de Castilla y León se merecen más que ser una pieza en las guerras internas del PP. Esto demuestra que el bipartidos es capaz de hacer cualquier cosa", ha lamentado.