El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pedido este jueves al nuevo líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, que no apoye la Ley de Violencia Intrafamiliar que los 'populares' han cerrado con Vox en el acuerdo de gobierno de Castilla y León. Así lo trasladó en una conversación informal que mantuvo con los periodistas que le acompañan en viaje a Rabat para reunirse con el rey Mohamed VI.
En ese sentido, Sánchez explicó que compartió con Feijóo la preocupación en Europa por el auge de la extrema derecha y le tanteó para ver si podían hacer un frente común en España. El presidente admitió este jueves que la reunión con el nuevo líder del Partido Popular, fue "cordial" pero reconoció que, pese a las tres horas de duración, salía de ella "con más incógnitas que certezas".
El presidente se mostró dispuesto a contribuir para frenar estos movimientos, pero Sánchez sostuvo que depende del PP y del espacio que comparten con Vox, por tanto, de la postura que adopte Núñez Feijóo con los de Santiago Abascal. "Si tiene una estrategia, no me la ha compartido", afirmó el jefe del Ejecutivo.
Después de tres horas de conversación, a Sánchez le quedó claro que Feijóo va a buscar con él la "confrontación" en lo económico, pero que ahora lo tiene difícil, según el presidente, para posicionarse en contra de las medidas del plan. De hecho, no le trasladó qué posición defenderá el PP en el Congreso cuando se convalide este real decreto ley sobre las consecuencias de la guerra en Ucrania pero le dio la sensación que se debaten entre la abstención y el no.
En la conversación informal con los periodistas, Sánchez dejó claro al líder popular que descarta la propuesta del PP de la deflactación del IRPF y afeó que no tengan propuestas concretas para hacer frente a la crisis. El presidente compartió la reflexión de que sistema político en España es multipartidista, por lo que Feijóo tiene que ver que hay políticas en las que hay acuerdo con el PP y y en otros se puede quedar con Vox fuera. La razón es que el plan, aseveró, “va a salir adelante” en los términos en los que lo aprobó el Gobierno, sin aceptar enmiendas de los demás partidos.