La crisis de la fábrica de galletas de Siro ha provocado la reunión hoy de los alcaldes de los municipios implicados con el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco. Todos ellos han mostrado su preocupación “ante una situación crítica y límite”, aunque dependiendo de su color político ponen el foco en la gestión de la Junta "que ha llegado tarde" o en la "falta de transparencia" de la empresa. Sea como sea, muchos puestos de trabajo están en juego y la situación es ya dramática, después del anuncio de que la nómina del mes de mayo no será abonada. Hoy, en las Cortes de Castilla y León, los alcaldes de Venta de Baños, Aguilar de Campoo y Toro han mantenido una reunión con el presidente.
José María López: “Ahora se han dado cuenta de que el problema era grande”
El alcalde de Venta de Baños, José María López, (PSOE) ha reconocido que el compromiso que se ha adquirido de la Junta “es colaborar e intentar ayudar en lo posible”, algo que para el alcalde “no es suficiente, el compromiso tiene que ser más fuerte”. Sobre la situación que se está viviendo en su pueblo: “Creemos que hay que inyectar dinero. Ha habido malos entendidos entre empresa y comité, la comunicación no ha sido la correcta. Nosotros creemos que hay que analizarlo, y los trabajadores son soberanos para decidir pero tienen que ver que se está viviendo una situación muy delicada”. Para la esperanza, el alcalde ha salido “más esperanzado” aunque se ha visto que “nadie se creía lo que iba a pasar y ahora se está viendo que estamos ante un problema serio que se tenía que haber atajado hace tiempo”, ha afirmado. “Esperemos que Junta y Diputación de Palencia pongan todos los medios para solventar este problema”, ha concluido para terminar afirmando que hay familias que lo están pasando muy mal porque viven de esta fábrica.
Indicó que se debe mantener el empleo, en la vieja fábrica de Siro o en otro sitio, y expuso que aunque la compañía quiere cerrar en dos años, cuando llega un nuevo inversor lo hace para ganar dinero, y “creemos que se puede revertir la situación”.
Tomás del Bien: “El tiempo se acaba”
El alcalde de Toro, Tomás del Bien (Partido Popular) ha anunciado que “el tiempo se acaba” por lo tanto, “tenemos que poner todos de nuestra parte”. Ha ido bien dentro de la situación que estamos viviendo. Hemos sacado en claro que ha habido una falta de transparencia a la hora de trasmitir la información a sus trabajadores, ya que muchos de ellos no se creen lo que les están contando. Tenemos que trabajar para llegar a un acuerdo. El plazo es muy ajustado para poder salvar las diferentes fábricas. La idea es que todas ellas sigan funcionando”, ha argumentado. Para Del Bien, la situación es “crítica porque se han dado ya unos plazos”.
María José Ortega: “Todas las partes tienen que renunciar a algo”
Por último, la alcaldesa de Aguilar de Campoo, María José Ortega Gómez (PP), ha afirmado que los alcaldeses “no se rinden”, y ha recordado que desde siempre en su municipio se ha mantenido una comunicación fluida entre todas las partes, “ahora hay que sentarse y tener la perspectiva que todas las partes tienen que renunciar a algo, como ocurrió hace tiempo en Aguilar. Para evitar que el futuro sea negro”. Y ha recordado que en Aguilar el Comité votó que sí al plan de viabilidad, después de “ceder todos”.
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