UGT ha vuelto a denunciar la pasividad de la Junta de Castilla y León ante la amenaza de incendios graves que están ocurriendo en estos momentos en Castilla y León. “Mientras ayer el consejero de Medioambiente, el Sr. Suárez-Quiñones, presentaba en León a bombo y platillo el operativo de incendios para el año 2022, que por decisión de la Junta comienza el 1 de julio y finaliza el 30 de septiembre, la masa forestal de nuestra comunidad seguía quemándose en zonas como la Sierra de la Culebra (Zamora) o la provincia de León”, asegura el sindicato.
Y, sin embargo, según manifiesta la organización sindical, “la Junta se niega a declarar el máximo grado de peligro y a poner en funcionamiento el operativo de incendios, previsto para el 1 de julio, a pesar de los múltiples incendios que se han producido y la gravedad de los mismos”.
En este sentido, Carlos Arenas, secretario de Acción Sindical de la UGT Servicios Públicos CyL, ha advertido que "mientras se quema nuestra masa forestal, sólo está en funcionamiento el 20% de los medios humanos y con un equipamiento mísero y de principios del siglo XX”.
Para Arenas, "la política de la Junta en materia de prevención y extinción de incendios es una ruleta rusa, en la que esperan que no pase nada, pero a la vista está que se dan todos los condicionantes para que hechos como los incendios del año pasado, vuelvan a producirse".
Por eso, desde UGT llevan reclamando varios meses que el operativo de incendios esté en funcionamiento durante todo el año “puesto que la extinción debe incluir la prevención”, que se negocie un nuevo Decreto de emergencias y que se dote apropiadamente al operativo de incendios, en personal, medios y formación.
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