La convocatoria de ayudas ‘Prevención de daños a bosques’, dotada inicialmente con 30 millones de euros, se ha incrementado en 11 millones, un 36,6 %, hasta alcanzar los 41 millones.
Está dirigida, en régimen de concurrencia competitiva, a personas físicas o jurídicas, agrupaciones y comunidades de bienes titulares de explotaciones o terrenos forestales en régimen privado y tienen por objeto financiar la elaboración de planes quinquenales de actuaciones preventivas de daños a los bosques, así como la realización de los tratamientos selvícolas e infraestructuras forestales. La convocatoria tiene como finalidad la concesión de ayudas al desarrollo rural que sirvan para prevenir los daños causados a los bosques por incendios, desastres naturales y catástrofes, contribuyendo con ello a la protección del medio ambiente y al freno del cambio climático. La línea se centra en terrenos no gestionados por la Consejería, sino directamente por sus propietarios (tanto particulares como entidades locales en montes patrimoniales), contribuyendo así a la estructuración de la propiedad forestal en régimen privado de gestión.
Esta línea de ayudas, cuyo plazo de presentación finalizó el pasado 14 de enero, recibió 1.313 solicitudes y un importe que alcanzaba los 96,8 millones de euros. Las actuaciones susceptibles que recibir subvención incluyen, además de los tratamientos selvícolas preventivos, otras tan relevantes o más para la prevención de incendios forestales como la construcción de puntos de agua, la apertura y conservación de cortafuegos, ejecución y mejora de pistas forestales, etc.
La línea de ayudas ‘Labores de mejora y prevención de daños en terrenos forestales con vocación silvopastoral’ estaba dotada con 20 millones de euros y la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio ha incrementado el presupuesto en un 35 %, con 7 millones más, hasta alcanzar los 27 millones. La Consejería había registrado 1.479 solicitudes, por un importe de 70,3 millones.
La convocatoria, también en régimen de concurrencia competitiva, financia la elaboración de un plan silvopastoral de duración quinquenal, así como la ejecución de labores de mejora y prevención de daños en estos terrenos forestales.
Los beneficiarios de estas ayudas son personas físicas o jurídicas, de derecho público o de derecho privado, titulares de explotaciones ganaderas con aprovechamiento de pastos o entidades locales propietarias de montes o terrenos forestales; agrupaciones integradas por varios titulares de explotaciones ganaderas de derecho privado, sin necesidad de constituirse con personalidad jurídica, para realizar en común las actuaciones; comunidades de bienes, siempre que puedan llevar a cabo las actuaciones previstas, y se encuentren en la situación que motiva la concesión de la subvención, siempre y cuando cuenten con C.E.A (código de explotación agraria); y entidades locales propietarias de montes o terrenos forestales que cuenten con C.E.A.
Se trata en esencia de una línea de ayudas dirigida a ganaderos de la Comunidad, y en concreto al fomento de ganaderías extensivas que colaboren en el control del matorral y en el establecimiento de discontinuidades en forma de pastizales bien aprovechados, contribuyendo de este modo a la prevención de la ocurrencia incendios forestales y a la facilitación de su control en caso de producirse.
Entre las labores de mejora se contemplan tanto las dirigidas de forma más directa a la prevención de incendios forestales (desbroces de matorral, implantación de pastizales, mejora de accesos, puntos de agua) como las encaminadas a mejorar el manejo racional de la ganadería y su integración en el medio natural, potenciando su papel sostenible en la reducción de los combustibles y la prevención de los incendios, contribuyendo también a mejorar la rentabilidad de las explotaciones.
Con estas dos ampliaciones se busca afianzar la eficacia de las medidas preventivas de diverso tipo que la Consejería lleva cerca más de una década impulsando, además de sus inversiones directas, a través de estas líneas cofinanciadas con los fondos FEADER e integradas en el Programa de Desarrollo Rural de Castilla y León.
La prevención de incendios forestales, en particular, es una cuestión territorial que excede el ámbito forestal y que debe abordarse desde una perspectiva integradora desde múltiples esferas, sobre todo forestal, agrícola, ganadera, urbanística, de infraestructuras y de protección civil.