La ola de crispación que se está viviendo en los parlamentos en la última semana ha provocado momentos muy tensos tanto en el Congreso como en las Cortes de Castilla y León. Ante esta situación, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha reclamado “una desescalada verbal” para serenar los ánimos políticos. Eso sí, ha hecho un matiz, que empiece por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Para el máximo dirigente autonómico, el líder socialista es el que tiene “mayor responsabilidad” de lo que se está viviendo porque con sus actuaciones está generando “crispación y polarización”. Y ha enumerado algunas situaciones como los cambios continuos del Código Penal “sin diálogo y sin meditación”, la modificación del delito de sedición o la “chapuza” de la ley del sí es sí, en unas declaraciones realizadas en Santiago de Compostela durante la realización de un tramo del Camino de Santiago.
Para Mañueco, todos los políticos deben actuar desde el “acuerdo y el entendimiento”, y ha insistido en que es necesaria una “desescalada verbal”, pero en este caso comenzando por el presidente Sánchez, al que ha acusado de “romper con sus principios” para poder sacar adelantes presupuestos y leyes.