La 'guerra' antiabortista de Vox le ha enfrentado directamente con su socio de Gobierno en Castilla y León, el Partido Popular. Sendas formaciones políticas llevan desde el jueves contradiciendo una a la otra por las medidas "provida" dadas a conocer por el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo. Una situación que ha llevado a la formación de Santiago a Abascal a lanzar un ultimátum a los populares: "Si Castilla y León no cumple con lo pactado, actuaremos en consecuencia".
Vox ha lamentado también que el portavoz del PP para la campaña electoral de los populares, Borja Sémper, haya tenido que "corregir" a Mañueco, al tiempo ha matizado que esperan que se atengan a lo "pactado", así lo han resumido en un comunicado enviado a los medios de comunicación.
El partido de Abascal ha recordado que el 12 de enero, tras la reunión de trabajo para cerrar el "acuerdo" del Gobierno de coalición en Castilla y León, Gallardo y el consejero de Economía y Hacienda y portavoz, Carlos Fernández Carriedo, comparecieron para anunciar la "puesta en marcha de actuaciones en favor de la natalidad y de la familia", algo que, según la formación de Abascal, "viene a dar cumplimento del pacto de Gobierno".
Del mismo modo, ha subrayado que seguidamente la Consejería de Sanidad emitió una nota en la que se recogían medidas tales como las "iniciativas dirigidas a ayudar a las mujeres que lo precisen a superar las dificultades para ser madre", o la "elaboración e implantación de un protocolo de latido fetal dentro de la atención programada en el primer trimestre", así como la promoción de acceso a las ecografías 4D.
La formación de Vox ha afirmado que ni la Presidencia de la Junta ni el PP "cuestionaron en ningún momento las medidas propuestas". Al día siguiente, según Vox, salieron informaciones publicadas en medios de comunicación que atacaban "mediante bulos y difamaciones" el acuerdo alcanzando entre el PP y Vox.
También han cargado contra distintos dirigentes del PP, tras sus declaraciones en las que se desmarca de las medidas "acordadas" en Castilla y León. En su escrito mencionan a Cuca Gamarra y a Borja Sémper, a quienes acusan de "atacar" a Vox y de expresar su rechazo a lo "acordado".
Por todo ello, recuerdan, que diferentes dirigentes de Vox han resumido que los "satélites mediáticos de la izquierda" han convertido estas medidas de "apoyo a la maternidad" en un "escándalo", llevando, incluso, a portavoces nacionales de los populares a "desautorizar" al presidente de la Junta.
Han subrayado que Gallardo explicó que ahora corresponde a Sanidad emitir la orden con las medidas aprobadas. "Vox ha negociado y pactado estas medidas y ahora confiamos en que el consejero se encargue de aplicarlas con responsabilidad", remarcaba el vicepresidente de la Junta.
Por su parte, el secretario general de Vox, Ignacio Garriga, ha insistido en que el partido "no va a dar ni un paso atrás" y se ha mostrado convencido de que el acuerdo se "aplicará": "Quiero ser positivo y quiero creer que el Partido Popular es gente de palabra. Han firmado un acuerdo, han firmado un protocolo y lo llevarán a término".
Por último, el portavoz del Grupo Parlamentario de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, se expresaba en los siguientes términos: "Si el PP se echa atrás, si incumple lo que ellos mismos han escrito, tendrán que explicarlo. Y si esto sucede será consecuencia de la influencia que tiene sobre ellos la izquierda".