La Alianza UPA-COAG ha denunciado el presunto fraude que se puede estar llevando a cabo en varias cadenas de supermercados en Castilla y León y en el conjunto de España por partes de Lidl y Día, que podrían estar vendiendo patata de conservación como si fuera patata nueva española, usando además supuestamente nombres de variedades que "no se corresponden con la realidad".
La organización ha detectado esta situación que vuelve a poner de manifiesto lo que vienen denunciando "desde hace tiempo" y es la "impunidad" con la que actúan distintas empresas de distribución por supuesta venta "a pérdidas" con productos agrarios o con "fraudes" al consumidor con publicidad engañosa.
En la misma línea, a través de un comunicado remitido a este periódico, subrayan que estas marcas ya han sido "denunciadas públicamente" en otras ocasiones por su organización al realizar prácticas que "son ilegales". UPA-COAG han afirmado que el presunto fraude se comete mediante los panales informativos y por lo tanto en el lineal, con lo que están "incumpliendo las prácticas de mercado y la legislación que al respecto existe".
De esta manera, la Alianza UPA-COAG exige a la Dirección General de Consumo de la Junta de Castilla y León, así como al Ministerio de Consumo y a la AICA que actúen de forma "inmediata" y realicen las pertinentes acciones para abrir expediente y sancionar "contundentemente" a las citadas cadenas, ya que, de lo contrario, la organización agraria entendería que los gobiernos de España y Castilla y León, "haciendo dejación de funciones, amparan la distribución en contra de los intereses de los agricultores y consumidores" de la Comunidad.
Han recordado que los cultivadores de patata de Castilla y León están en una situación "delicada" por los precios que en muchos casos son "sensiblemente inferiores" a los de producción, y que en algunas campañas han tenido que dejarlas en las tierras "por no tener precio".
Por último, han recalcado que es "habitual" que cada año en España la patata vieja francesa "inunde el mercado español", así como que una parte del sector de la distribución la comercializa como "patata nueva" y en ciertas fechas como "patata lavada", confundiendo así a los consumidores en los lineales de forma "impúdica".
Informe de laboratorio
La Alianza UPA-COAG ha querido ir un paso más allá y ha documentado que este supuesto fraude se continúa realizando. De esta manera, aportan fotografías de una compra en el establecimiento situado en la calle Valentín Jalón de Burgos el pasado 2 de febrero, donde se vendía 'patata para freir', del proveedor G.V. El Zamorano S.A, bajo el etiquetado de patata nueva de la variedad agria.
Sin embargo, el informe del labotario, al que ha tenido acceso este periódico, remarca que el resultado del análisis demuestra que "la muestra presenta un perfil molecular diferente que la variedad agria". Igualmente, destaca que el etiquetado pone que es recomendada para freír. Ahora bien, el resultado del test culinario, según este informe, es 'Ko'.