Hace años que los jóvenes de Castilla y León ya no quieren ser futbolistas, estrellas de cine, astronautas o médicos. Ahora quieren ser funcionarios o al menos que su sueldo lo pague la administración que sabe que siempre paga. La estabilidad de un empleo público sigue siguiendo el objetivo de los castellanos y leoneses. Y por suerte, las administraciones cumplen con su idea en un año donde la Comunidad vivirá una convocatoria histórica de empleo público.
El número de personas que están a sueldo de la administración en Castilla y León, en este caso no hace falta que sean funcionarios con plaza fija, simplemente estar a sueldo, se sitúa ya en 220.500, una cifra histórica de empleo público que incluso supera a los peores años de la recesión económica de 2008. Un 21,7% de los 1.014.300 ocupados en la Comunidad reciben cada mes su salario de las arcas públicas. Una cifra récord que ha ido aumentando desde el 20,4% del pasado año, el 19,6% de 2017 o el 20,4% de hace diez años.
Ese 21,7% es llamativo porque es la segunda más alta de todas las comunidades de España. Solo Extremadura con un desorbitado 26,9% le supera. La media nacional es de 17,2%. Así, Andalucía tiene un 19%, Aragón un 18,2%, Asturias 19,7%, Baleares 15,3%, Canarias, 17,7%, en Castilla-La Mancha se registra un 18,6%, en Cataluña un 13,9%, Galicia un 17,8%, la Comunidad de Madrid, 16,2%, un 15,6% en Región de Murcia, 16,9 en Navarra, un 17,3% en el País Vasco y en La Rioja un 15,2%.
Este aumento de la plantilla pública ha servido para enmascarar el retroceso del empleo privado, ya que el sector público ha creado más del 70% de los 25.500 ocupados que ganó Castilla y León en 2022. Lo dicen los datos de la encuesta de población activa que publica periódicamente el Instituto Nacional de Estadística (INE) y donde el empleo público comprende todos los asalariados de Empresas Públicas y de las Administraciones Centrales y Territoriales, incluidos tanto los trabajadores que cotizan al régimen general de la Seguridad Social como los adscritos a Mutualidades. En este caso refleja la evolución del número de trabajadores al servicio de las administraciones ya sean estatales, autonómicas y locales, y en organismos públicos, mientras también dice que los empleos en empresas privadas van en decrecimiento.
De esas 220.500 personas que trabajan a sueldo en el sector público, la Encuesta dice que 94.300 son hombres y 126.200 son mujeres. Y lo más llamativo, han aumentado en 18.500 personas en el último año. Respecto a 2017, el número era de 189.700 asalariados por cuenta de la administración. Mientras que en 2012, hace una década, la cifra era de 190.700.
El boletín también analiza la edad de la plantilla en la Administración General del Estado (AGE): A tenor de la pirámide de edad, el 41,56% de los empleados públicos de la AGE se encuentran entren los 50 y 59 años, siendo mayores de 50 el 63,46% de la plantilla. Los menores de 40 no superan el 15%.
Cada vez hay más castellanos y leoneses apuntados a academias para preparar las oposiciones, que junto a los efectos de la pandemia en la plantilla pública donde se ha contratado a mucha gente, sobre todo en Sanidad y Educación, y el impacto de la crisis en el empleo privado, que se ha ido supliendo con el público, han provocado este nuevo récord. Solo entre enero de 2022 y julio de este año, la plantilla pública ha aumentado en casi 5.000 personas.
Cifras similares, pero sin actualidad las que se obtienen del Boletín Estadístico del personal al servicio de las Administraciones públicas que suministra el Ministerio de Política territorial a fecha de julio de este pasado año. 165.738 funcionarios de toda la Comunidad que suponen un 17% de la población ocupada. Es decir, que casi dos de cada diez castellanos y leones trabajan en la administración pública, pero en este caso sí con plaza fija. Se reparten con 34.977 funcionarios del Estado, 97.081 de la Junta de Castilla y León y 33.680 de entidades locales.
A lo largo del año 2023, como ya hemos indicado, el empleo público va a crecer y se seguirá convocando nuevas oposiciones para cubrir plazas vacantes por jubilación y, también, para convertir en fijos a los interinos. Castilla y León ya lo ha anunciado. Por ejemplo en Sanidad, . Lo será tanto por el número de categorías incluidas (un total de 107) como por el número de plazas total incluidas (5.813 de momento, pendiente de actualización). Una convocatoria extraordinaria que permitirá a la Sanidad de Castilla y León pasar de una temporalidad del 23 % a cerca de un 1 %, muy inferior al 8 % que establece la ley.