“Un reto complicado pero que se puede lograr entre todos”, así ha definido Enrique Cabero Morán, presidente del Consejo Económico y Social de Castilla y León (Cescyl), el futuro que se plantea para el comercio de proximidad y tradicional tanto en el medio urbano como rural en los próximos años durante su discurso de inauguración del foro organizado por El Español Noticias de Castilla y León, en colaboración con la Facultad de Comercio de la Universidad de Valladolid y el propio CES.
Para Cabero, “el comercio marca una línea de actividad económica que le convierte en un núcleo directo en la generación de empresa como también como elemento de vertebración tanto en el medio rural como en el urbano”.
El presidente del CES ha anunciado durante la celebración del foro Retos del Comercio de Proximidad en Castilla y León que se ha realizado un informe a iniciativa propia sobre la economía en el comercio de proximidad que cuenta con la colaboración de la Facultad de Comercio y su cátedra de innovación. Un estudio cuyos resultados se tendrán en breve pero donde ha adelantado que se centrará en dos perspectivas: la naturaleza social del comercio y la económica.
“Cuando el comercio va bien, la sociedad va mejor”
Cabero ha recordado que el comercio ha sido fundamental para la fundación de ciudades, estados y países, tanto a nivel exterior como interior para el desarrollo y bienestar. “Cuando el comercio va bien, la sociedad va mejor”, ha afirmado. En su opinión, el comercio de proximidad “da entidad” a los ámbitos donde se desarrolla. Por eso, el cierre de comercios afecta tanto a la economía como a la entidad social de una zona, sobre todo en el medio rural.
El CES ha estudiado la importancia del comercio en los pequeños y medianos pueblos de Castilla y León. “Qué sería del mundo rural sin comercio”, se ha preguntado. Para analizar que es de vital importancia a la hora de que los vecinos, muchos de ellos con falta de movilidad, puedan acceder a productos básicos a y un “coste razonable”. “El comercio es clave para que los pequeños pueblos de la Comunidad sigan teniendo el atractivo suficiente para mantener y ampliar población”, ha asegurado.
Pero no solo afecta al medio rural, Cabero también ha incidido en lo que pierde el mundo urbano que también se ve afectado. “Las ciudades responden a una forma de ser a una identidad. Ofrecen una imagen. Si eliminamos esa personalidad en el medio urbano, todas las ciudades serán iguales, ya que los comercios crean atracción y definición de una ciudad. Sin comercio de proximidad, esa ciudad no es atractiva”. Además ha recordado la importancia de los escaparates bien iluminados que se convierte en “espacios públicos” para evitar “zonas oscuras”.
Por último, ha incidido en el valor que el comercio cercano tiene en la economía de Castilla y León, pues aporta al PIB el 9% y crea un número elevado de empresas, y de empleo estable de calidad. Por eso, ha abogado porque un sector que está acusando dos crisis en poco tiempo tiene que saber adaptarse a los nuevos retos con una nueva mentalidad, nuevas presentaciones, captación de clientes y, por supuesto, amoldarse a las nuevas tecnologías. “Necesitamos un respaldo para el comercio de proximidad”, ha concluido para animar a empresas, sindicatos, administración y ciudadanos para apostar por este sector a través de un plan estratégico y pensando en un relevo generacional.