Cinco ciudades de Castilla y León se encuentran entre las 10 de España con la factura del agua más barata, según un informe publicado este jueves por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que ha analizado el coste del agua en 54 capitales. Además, es destacable que todas las capitales de provincia de Castilla y León se encuentran por debajo de la media nacional, situada en 306 euros al año para un consumo anual de 175 metros cúbicos de agua, lo que equivale a un hogar de tres o cuatro personas.
Palencia es la segunda capital de provincia más barata de España con un coste total de 166 euros por cada 175 metros cúbicos, solo por detrás de Guadalajara, que se ubica en la primera posición con 164 euros. Soria, Ávila y Burgos ocupan el quinto, el sexto y el séptimo puesto respectivamente, con costes totales al año de 196, 199 y 204 euros, mientras que León está en el décimo lugar de España, con 220 euros.
Otra capital de provincia de la Comunidad, Valladolid, se encuentra en el top 15 de las más baratas ya que aparece en el puesto 12, con 227 euros al año. Después, iría Zamora, con 263 euros, en el 17º puesto, mientras que Segovia y Salamanca se ubican en el 23º y 24º puestos, con 279 euros anuales. Las capitales de provincia con la factura del agua más cara de España son Barcelona y Murcia, con 520 y 495 euros al año, respectivamente.
La OCU exige al Gobierno y las comunidades que impulsen una "armonización" de las tarifas
La OCU ha destacado, además, en su análisis que son especialmente significativas las subidas de precios en varias capitales desde 2020, con un 11,6% en Salamanca; un 12,3% en Soria y un 13,5% en León para el perfil de consumo seleccionado. Los costes fijos se encuentran en Soria en un total de 60 euros; en Salamanca y Zamora en 58; en Segovia en 50; en las ciudades de Ávila y Burgos en 48; en León en 57; en la ciudad de Palencia en 44 y en Valladolid en 36.
La OCU ha exigido al Gobierno y a las comunidades autónomas que impulsen "una armonización" de las tarifas municipales del agua para que sean "transparentes, comparables y sencillas" que garanticen "un precio accesible" para el consumo básico además de "penalizar" un consumo excesivo de agua. Además, ha pedido que se promueva "una tarifa reducida y única" para los hogares considerados vulnerables, independientemente del municipio en el que residan.