El nuevo curso ha arrancado en Castilla y León. Día de lloros, pero también de emoción e ilusión. Sin embargo, existe un sector que se muestra muy preocupado con esta nueva andadura: el del transporte público de viajeros por carretera de la Comunidad.
Desde la Federación Castellano y Leonesa de Transporte en Autobús (FECYLBUS) se recuerda que la Ley de Transporte Público de Viajeros por Carretera de Castilla y León garantiza el derecho a la movilidad de la población residente en la Comunidad, calificando el transporte como un servicio público esencial. Además, Desde se quiere alertar de la situación empresarial que sufren las empresas del sector y que, de manera concreta, se agrava en lo relacionado al transporte escolar¡ que realizan para la Consejería de Educación, con 2.000 rutas y el traslado, durante todos los días del curso escolar, de 36.000 alumnos, con puntualidad y seguridad.
Castilla y León fue pionera en España al poner en marcha un servicio de autobús que integraba el transporte regular y el escolar, que con los años ha crecido y beneficiado a los ciudadanos de una Comunidad Autónoma que sufre la despoblación de manera grave. En 2005 se inició este modelo de prestación conjunta, aunque la mayor parte de estos servicios integrados se crearon en 2016, con un incremento constante desde entonces hasta la fecha, asegura la Federación en un comunicado.
“Con el paso del tiempo, esta prestación se ha mantenido de manera eficaz y sostenible por parte de las empresas, asegurando una oferta adecuada en beneficio de los castellanos y leoneses. Sin embargo, a lo largo de todo este periodo, cerca de 20 años, la Consejería de Educación no ha revisado los precios de estos servicios integrados, a pesar de las múltiples ocasiones en las que se ha instado a ello desde FECYLBUS. Es decir, el mismo precio que se cobraba en 2005 se sigue cobrando en 2023, sin tener en cuenta subidas tan severas como las que está teniendo el IPC”, lamentan.
Además recuerdan que Educación no ha afrontado el pago de la ayuda a la implementación del protocolo Covid, correspondiente al curso 2021-2022 y que obligaba a las empresas de autocares a adelantar gastos extra por higienización para evitar la propagación de la covid en el transporte. Tampoco ha atendido los requerimientos realizados desde FECYLBUS, insistiendo en la necesidad de una solución “inmediata y certera”, para revisar los precios de los servicios integrados y agilizar el pago de la citada ayuda.
FECYLBUS muestra su preocupación por la situación económica, que es “más que complicada”, en la que se encuentran las empresas de transporte en autobús de Castilla y León que prestan estos servicios.