Nubarrón económico en Castilla y León: desaceleración e incertidumbre ante un invierno que se espera duro

El Servicio de Estudios Económicos (EcovaEstudios) ha presentado en la mañana de este martes, 19 de septiembre, el Observatorio Económico de Castilla y León correspondiente al segundo trimestre y la perspectiva futura que no es nada halagüeña con la incertidumbre y la desaceleración como protagonistas.

“En el segundo trimestre del año 2023 hemos constatado un crecimiento débil y una desaceleración económica con alta incertidumbre”, ha señalado en rueda de prensa el presidente del Ecova, Juan Carlos De Margarida, que ha señalado, además, que “la recuperación será lenta y muy pausada en el tiempo”.

Inestabilidad y decrecimiento

En las variables que ha analizado EcovaEstudios se ha enfatizado en que “el crecimiento económico en la región, que venimos arrastrando, se ha mantenido” eso sí, “con ciertos vaivenes de inestabilidad”, aunque De Margarida ha asegurado que “va a comenzar a desacelerarse a causa de las políticas monetarias restrictivas del Banco Central Europeo” con esa subida de tipos concretada en los últimos días, y “a causa de la contracción de la economía china”.

También, la desaceleración de otras economías fuertes de la Eurozona, como por ejemplo la de Alemania, causarán un “efecto dominó” en Europa y también en nuestra Comunidad, ya que en nuestra región más del 70% de las exportaciones se dirigen a la Unión Europea.

También ha hablado, el presidente de Ecova, del mercado de trabajo, asegurando que comienza a “dar síntomas de desaceleración” a lo que se debe sumar que Castilla y León sufre, en la actualidad, un “estancamiento de la población” sumado al “alto nivel de envejecimiento” que ponen otro nubarrón al futuro, a no ser que la población extranjera aumente, en los próximos años.

Unos problemas, hablando de la población, que repercuten directamente en “las cuentas públicas” ya que se han de aumentar “las partidas presupuestarias como el coste sanitario” y también los “cuidados asistenciales” lo que puede provocar un “incremento exponencial de la deuda si no crecen los ingresos”, ha explicado De Margarida.

El sector empresarial, por su parte, está “viendo incrementados sus costes de mano de obra” por lo que se produce una “reducción notable de los márgenes y beneficios que se traslada al consumidor”.

Una política expansiva que “desestabiliza la economía de España” y la inflación

Juan Carlos De Margarida ha hecho mención también a las variables sobre la deuda pública y ha lanzado un dardo al Gobierno nacional y al de Castilla y León. “Existe una política económica expansiva que desestabiliza la economía de España y de la región sin visos de solución”, ha apuntado, añadiendo que “existe una clara irresponsabilidad a la hora de gestionar los recursos públicos, lo que provoca que lo coyuntural se acabe transformando en estructural”.

Como no podía ser de otra forma, desde el Ecova también han analizado los efectos de una inflación acuciante, más aún desde la llegada de la Guerra de Ucrania. “Se están manteniendo en niveles altos durante demasiado tiempo con el consiguiente riesgo de entrar en recesión”, ha afirmado el presidente del Ecova.

“Aunque se produzca una gran desaceleración de la economía en el último trimestre, la sensación de alarma no existe por parte del Gobierno, empresas y ciudadanos. Nos enfrentamos a un horizonte económico muy complejo con una economía muy volátil, insegura y preocupante, lo que provoca una gran incertidumbre”, ha señalado, en su exposición, Juan Carlos de Margarida.

Conclusiones preocupantes

La tendencia, como ha apuntado el director del Ecova, para este final de 2023, para 2024 y para 2025, no es “nada halagüeña” con “una desaceleración sin controlar ni el gasto ni el déficit”, ha añadido y ha defendido la apuesta por los Fondos Next Generation, que “pueden ser claves” pero para ello “hace falta voluntad política”.

“El panorama no es alentador con presupuestos desequilibrados, más deuda, mucho gasto público, subida de tipos de interés, pérdida de poder adquisitivo, pérdida de confianza y disminución de las exportaciones. Todo ello unido a las consecuencias de la Guerra de Ucrania y a las crisis bancarias”, ha defendido De Margarida.

En cuanto a las perspectivas de futuro, ha finalizado que existen “unas realidades que hay que afrontar”. Como, por ejemplo, “el retorno al cumplimiento de las reglas fiscales en 2024”, también a una “reducción drástica del gasto público o a una aminoración de la deuda”.

La realidad actual nos puede llevar, como ha apuntado el director de Ecova, a una “posible recesión técnica que pudiera estar a la vuelta de la esquina”.

Un futuro, a corto medio plazo que no se antoja nada halagüeño en Castilla y León. Tocará apretarse el cinturón ante un invierno al que hay que sumar costes, en todas las familias, como puede ser el de la calefacción.