El Partido Popular ha convocado manifestaciones contra la amnistía para este domingo 12 en todas las capitales de provincia de España, a las 12 horas. Y por supuesto Castilla y León tendrá mucho protagonismo. Lo hacen “para defender el Estado de derecho, protestar contra la amnistía y garantizar la igualdad de los españoles”.
Así, en el caso de la Comunidad, se han elegido la Plaza de San Vicente, en Ávila; en Burgos se celebrará en la Plaza del Rey San Fernando; la Plaza de San Marcelo es el lugar elegido en León; la Plaza Mayor de Palencia el escenario en tierras palentinas; la Plaza del Liceo, en Salamanca. Por su parte, el Acueducto vivirá la manifestación de Segovia; la Plaza de Mariano Granados, en Soria; la calle Santiago con Plaza Mayor, en Valladolid, y, por último, la Plaza de la Constitución, en Zamora. En todos los actos se leerá el mismo manifiesto y habrá también intervenciones políticas. La hora de inicio será a las 12.00 horas en todas ellas.
Por su parte, el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ya ha confirmado que participará en la manifestación de Salamanca para “de forma serena pero firme, defender la dignidad de nuestra Comunidad y de España. Un mensaje que ha publicado también a través de redes sociales y que ha concluido con un “No nos van a callar. España no se rinde”. En el acto también participará el presidente provincial del Partido Popular, Carlos García Carbayo.
En el caso de Valladolid, será el presidente del PP de Valladolid, Conrado Íscar, acompañado de representantes del PP de Valladolid, quien interviene en la concentración.
“En el Partido Popular ni nos vamos a amedrentar ni nadie nos va a silenciar ante los constantes atropellos que se están gestando para posibilitar, a costa de los ciudadanos y la legalidad vigente, que Pedro Sánchez siga siendo presidente del Gobierno a costa de lo que sea”, afirman.
El PP afirma que quiere “alzar la voz” de manera pacífica pero constante y utilizar todos los recursos legales a su disposición para frenar en todas las instituciones lo que considera una “compra de voluntades para que este socialismo siga perpetuándose en el poder con partidos que pretenden la ruptura de España”.