El temporal provocado por la borrasca Juan, a pesar de aminorarse en las últimas horas, aunque las mínimas se mantienen en cifras realmente frías, ha dejado un rastro de consecuencias muy incidente en Castilla y León. De esta forma, según la información facilitada por la Dirección General de Tráfico (DGT), hay siete carreteras cortadas por inundaciones a raíz de la crecida de los ríos y dos por placas de hielo en la calzada.
La información, actualizada a las 19:00 horas, pone de manifiesto que hay hasta cuatro provincias afectadas. En el caso de las inundaciones, estas se han producido en Valladolid, Segovia y Ávila, mientras que en Salamanca permanecen cerrada al tráfico dos carreteras por las placas de hielo formazas en la calzada a consecuencia de las temperaturas bajo cero.
Estas últimas se tratan de la DSA-191, entre los kilómetros 7,2 y 10,6, en Candelario, y la SA-203, entre los kilómetros 8 y 12, en la Peña de Francia.
De las siete carreteras cortadas por inundaciones, tres se ubican en Segovia. Son la SG-P-2131, desde el kilómetro 18, en Aldeasoña, hasta el 19, en Laguna de Contreras, la SG-V-3413, desde el kilómetro 6, en Domingo de Gracia, hasta el 7, en Nava de la Asunción, y la SG-413, entre el kilómetro 0, en Montejo de Arévalo, y el 10, en Martín Muñoz de la Dehesa.
Otras dos se ubican en Valladolid. Son por un lado la VP-2005, en el kilómetro 9, a la altura del municipio de Rábano. Lugar donde, además, se han inundado dos casas, teniendo que ser necesaria la evacuación de los vecinos afectados. La otra vía afectada en la provincia del Pisuerga por la crecida de los ríos ha sido la VP-9003, entre los kilómetros 5 y 6, en Viana de Cega.
Por último, en Ávila se han cortado la AV-P-120, entre los kilómetros 3 y 7, entre San Pascual y Cabizuela, y la AV-P-129a, del kilómetro 0 al 5, entre Rasueros y Horcajo de las Torres.