Castilla y León y el País Vasco están condenadas a entenderse. Son dos comunidades limítrofes y tienen muchas cosas en común. La más importante un montón de cientos de kilómetros que comparten en el norte de la provincia de Burgos y el famoso Condado de Treviño. Por eso, es necesaria la colaboración entre los dos gobiernos. Algo que se lleva haciendo desde hace mucho tiempo, pero que en las últimas semanas las aguas bajan algo turbias entre declaraciones de unos y de otros. Y es que en muchos pueblos de la zona de Las Merindades se encuentran más cerca de Euskadi que de Castilla para temas relacionados con los servicios sociales y básicos.
En concreto desde que la Consejería de Presidencia de la Junta de Castilla y León informara a la agencia Ical de que el gobierno vasco “vetaba” la renovación de los acuerdos por estar presente Vox en el Ejecutivo autonómico. Incluso el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo también ha pedido su actualización "apartando todo tipo de sectarismos e intereses partidistas". Para conocer lo que está pasando, primero hay que hacer memoria con unos acuerdos que datan de 2012 con Patxi López, hoy portavoz en el Congreso del PSOE, y Juan Vicente Herrera, presidente de la Junta. En 19 páginas se ponía sobre la mesa acuerdos de colaboración tan importantes como la atención sanitaria de urgencias, emergencias y transporte sanitario.
[CONSULTA AQUÍ EL ACUERDO DE COLABORACIÓN ENTRE CASTILLA Y LEON Y EL PAÍS VASCO]
En 2021, con el gobierno en Castilla y León entre PP y Ciudadanos, el entonces consejero de Presidencia, Ángel Ibáñez, se reunió Vitoria con la consejera de Gobernanza Pública y Autogobierno vasca, Olatz Garamendi, allí habló de que la renovación de este acuerdo estaba muy cercano con la satisfacción para las cerca de las 24.000 tarjetas sanitarias de la comarca para poder elegir entre Sanidad Castilla y León (Sacyl) u Osakidetza (sanidad vasca). Pero la inesperada convocatoria de elecciones en Castilla y León hizo que la firma del nuevo protocolo de colaboración entre las dos autonomías que se iba a celebrar en diciembre de 2021 se suspendiera. Desde entonces nada se sabe.
Y de este acuerdo están pendientes muchos vecinos de la zona de las Merindades. Ellos llevan tiempo exigiendo poder elegir ser atendidos en hospitales de Vizcaya, al tenerlos más cercanos, pero también por tener mejores conexiones para llegar. Los habitantes de la comarca, excepto los de Espinosa de los Monteros y Mena, no pueden tener esta opción. La Plataforma por la Sanidad Pública de Las Merindades, fue creada en 2017, con la intención de reclamar la revisión del concierto sanitario con el País Vasco y la firma de un acuerdo de colaboración con Cantabria, a fin de garantizar una atención sanitaria de calidad y próxima a los vecinos de la comarca burgalesa.
En ese momento ya se ponía sobre la mesa el caso. Los vecinos de esta zona tienen como hospital de referencia el Santiago Apóstol de Miranda de Ebro, pero no existe una línea de autobús entre la comarca y la capital del Ebro, por ejemplo. Además, en la mayoría de los casos los centros hospitalarios más próximos están en País Vasco o Cantabria. Lo que da lugar a hechos muy surrealistas. La localidad de Castresana, en el Valle de Losa, se encuentra a 60 kilómetros de Bilbao, mientras que la distancia con Burgos capital es de 103 kilómetros. Son muchos los que lamentan esta situación que provoca que envíen a una persona mayor al hospital burgalés cuando muchos tienen a sus familiares viviendo en Vizcaya. O que el único autobús desde el Valle sea a Bilbao y no a Burgos o a Miranda.
Las carreteras de conexión con la capital burgalesa se convierten en una odisea, sobre todo cuando nieva, y las que conectan con la zona vasca son mejores y sin apenas dificultades por el clima. Por eso en esta zona se quiere llegar a un acuerdo cuando antes, pero de momento no va a llegar.
Fuentes de la consejería de Sanidad confirman a El ESPAÑOL Noticias de Castilla y León que “el convenio sanitario con el País Vasco está en fase de negociación en estos momentos”. No pueden ofrecer más detalles, pero certifican que Osakidetxa sigue atendiendo a los pacientes que llegan desde Miranda de Ebro y otras zonas sin ningún problema. Por supuesto, de la zona de Merindades no se dice nada.
La respuesta del Gobierno vasco
Este periódico se ha puesto también en contacto con el gobierno vasco que a través de un email ha respondido a la situación que se está viviendo entre las dos comunidades. “La firma del nuevo convenio fue suspendida por las elecciones autonómicas en Castilla León”, es la razón que esgrimen desde Vitoria para justificar este parón. “En estos momentos se está trabajando en ámbitos concretos como el de salud para ampliar el convenio de colaboración”, aseguran, negando en este caso que exista un veto. Además aclaran que “mientras tanto los acuerdos y la colaboración entre ambos Gobiernos se realiza en base a los acuerdos anteriores”, es decir, a lo acordado entre López y Herrera en 2012.
Eso sí, desde el Gobierno se espera “que pronto lleguemos a nuevos acuerdos que puedan ampliar las prestaciones recogidas en el convenio. En cualquier caso, como ya le hemos indicado, se sigue manteniendo todas las prestaciones tal y como estaban estipuladas en el anterior acuerdo”. Es decir, que para los vascos todo sigue igual, se está negociando, pero de momento no hay novedades.
Sin embargo, no se puede ser muy optimistas con estas negociaciones que se van retrasando en el tiempo por unos y por otros. Entre otras cosas porque para 2024 se esperan también elecciones en Euskadi, todavía no está fijada fecha, por lo que podría suceder lo mismo. Mientras tanto son los vecinos de la frontera los que siguen esperando y desesperados.
La respuesta del PSOE
Y por supuesto en estas aguas turbias que bajan desde el norte también se ha involucrado el PSOE, en este caso el secretario general del PSOE de Castilla y León y portavoz en las Cortes, Luis Tudanca acusó al Partido Popular de "mentir" al asegurar que el convenio sanitario entre la comarca burgalesa de Las Merindades y el País Vasco está "paralizado", pero que "no hay ningún bloqueo ni ningún veto", afirmó líder de los socialistas en la Comunidad durante una visita a la localidad burgalesa de Trespaderne.
Tudanca echa la culpa del Gobierno de Mañueco de no cumplir con sus ciudadanos y excusa al vasco. "Si estamos hablando de la necesidad de un convenio con el País Vasco para atender mejor a los vecinos de toda la comarca en la sanidad pública es porque la Junta de Castilla y León es incapaz de prestar el servicio de forma adecuada", afirmó. Para confirmar que "no hay ningún veto, ni siquiera porque esté la extrema derecha haciendo tanto daño a esta Comunidad y a su gente desde el Gobierno de la Junta, con la complicidad de Mañueco y el PP".
Por su parte, el presidente del Partido Popular (PP) de Burgos, Borja Suárez, ha considerado prioritario para 2024 "desatascar" el convenio sanitario entre la comarca burgalesa de Las Merindades y el País Vasco. "Esperemos que se quiten este tipo de excusas y que de una vez por todas tengamos un convenio en el que se beneficia tanto el castellano y leonés, el burgalés en este caso, como el vasco, en esa relación de entender que hay que ponerse de acuerdo en cuestiones tan lógicas y tan sensibles como son las sanitarias con independencia de donde resida en este caso el vecino que recibe esa atención", afirmó hace unos días.
Un protocolo de 19 páginas y 26 puntos
El tema sanitario es el que más preocupa, aunque es cierto que hay otros que pueden causar choque en este protocolo que está formado por 26 puntos repartidos en 19 páginas. Por ejemplo, el punto nueve donde se habla de la asistencia a mujeres víctimas de la violencia de género. Ambas administraciones se comprometen a colaborar conjuntamente en campañas y programas de sensibilización contra las distintas manifestaciones de la violencia de género y a pactar, en caso de que se considere conveniente, la posible cesión de la creatividad o de los soportes para la difusión de campañas.
También tiene su importancia la colaboración en asuntos de Protección Civil. El Gobierno Vasco y la Junta de Castilla y León declaran su voluntad expresa de colaborar activamente con el objetivo de evitar, reducir o corregir los daños causados a personas, medio ambiente o bienes por toda clase de medios y por los elementos naturales en las zonas limítrofes o en las que la acción conjunta de ambas Administraciones resulte conveniente, destacando la colaboración entre el servicio del 112.
Asimismo se habla de la formación de miembros de los cuerpos de policía local y de los servicios de salvamento y extinción de incendios, a través de la Escuela Regional de Policía de Ávila y de la Escuela Regional de Bomberos de Salamanca, así como de la Mina Escuela de El Bierzo y del Centro del Fuego en León, por parte de Castilla y León y, a través de la Academia de Policía y Emergencias del País Vasco en Arkaute por parte de Euskadi.
Otros temas son Infraestructuras de comunicación y transportes, la innovación y la internacionalización, educación, comercio, industria, etc. De momento todo se queda como esta, aunque se prolongue un acuerdo 12 años después.