Los empleados públicos de Castilla y León cobrarán en marzo una subida del 0,5% retroactiva desde enero de 2023, después de la aprobación del incremento en el Consejo de Ministros de esta semana. El consejero de Economía y Hacienda y portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, ha señalado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno de este jueves que, de esta forma, se producirá un 3,5% de incremento salarial para estos trabajadores el año anterior.
"Lo que haremos es proceder al pago en marzo con efecto retroactivo al 1 de enero en 2023 y el coste de la actuación será de 25 millones adicionales a lo que veníamos gastando", ha concretado. Carriedo ha señalado que en el mes de marzo se cobrará la mensualidad correspondiente más todo lo retroactivo a los 14 meses anteriores.
Además, con respecto al incremento del coste, ha señalado que habría que incluir la puesta en marcha de la iniciativa de la jornada de las 35 horas que, según ha comentado, "tiene un coste relevante por contratar profesionales" y también los nuevos desarrollos de grados de la carrera profesional, "llegando a nuevos grados". "Nos cuesta 25 millones de euros, lo que hacemos es retrotraer el pago hasta el 1 de enero de 2023", ha insistido.
Carriedo: "Los pagos a los centros públicos se van a producir"
Preguntado por los supuestos impagos a centros educativos públicos por parte de la Junta, el portavoz ha recordado que los servicios centrales y los centros educativos "son Junta de Castilla León". "Lo que tiene son diversas cuentas tesoreras y según las circunstancias tenemos las cantidades en caja según conviene en función de los pagos", ha afirmado.
Carriedo ha asegurado que "está plenamente asegurado" el pago de esas cuentas tesoreras en lo relativo a los suministros de electricidad y calefacción de los centros. "Estos pagos se van a producir y se van a seguir produciendo", ha zanjado.