La Fundación de Castilla y León se ha convertido en un auténtico juguete roto en el seno de la Comunidad. Creada en el año 2003 con el nombre de Fundación Villalar, cuando el presidente de la Cámara era el popular José Manuel Fernández Santiago, su objetivo inicial fue el de dar un impulso al sentimiento de pertenencia en una comunidad autónoma con grandes dificultades para hacer gala de una identidad propia, al contar con diferentes sensibilidades identitarias fruto de la creación artificial de la misma.
Desde su creación, la Fundación Villalar se encargó de organizar la fiesta de la Comunidad en la localidad vallisoletana de Villalar de los Comuneros y mostró su intención de convertir a ese municipio en depositario de los símbolos de la región. Además, se dedica a convocar becas, organizar diversos concursos culturales e impulsar publicaciones acerca de la historia, la geografía y el patrimonio de la Comunidad.
A pesar de esas buenas intenciones iniciales, la Fundación nunca terminó de despegar y quedó siempre en un segundo plano, sin llegar a conseguir nunca los objetivos con los que nació. Prueba de ello fue la paulatina reducción de presupuesto de la misma y el hecho de que nunca llegase a contar con un protagonismo en el día a día de la Comunidad. En 2020, finalmente, bajo la presidencia de las Cortes de Luis Fuentes (Cs), la Fundación renunció a su objetivo inicial de fomentar el sentimiento de pertenencia, asumiendo así su fracaso, cambió de nombre a Fundación de Castilla y León y potenció su carácter social y cultural, aunque en esa labor su papel también ha sido residual.
Un portal de transparencia desactualizado y opaco
El Portal de Transparencia de la página web de la Fundación de Castilla y León se encuentra desactualizado y es especialmente opaco. Desde el mismo, solo se puede acceder a las cuentas anuales de la entidad hasta el año 2021, el año anterior a que Vox entrase a formar parte del Gobierno de la Comunidad, y, en lo relativo a los planes de actuaciones, solo pueden consultarse hasta 2022, justo el año en el que los de García-Gallardo irrumpieron en el Ejecutivo autonómico. En los últimos años, la actividad que mantiene la fundación es prácticamente testimonial, y enfocada básicamente a actividades con escolares o culturales de escasa repercusión.
En el Plan de Actuación de 2022 se detallan las cinco actividades realizadas por la entidad durante ese año. La primera de ellas, con el nombre 'Educación en valores democráticos y en el conocimiento del español y del patrimonio histórico, artístico y natural de Castilla y León', con una inversión total de 48.370 euros, la segunda 'Promoción del talento y la creatividad así como las aportaciones de Castilla y León al presente del conocimiento y de la ciencia', dotada de 194.606 euros, y la tercera llamada 'Promoción de la conciencia solidaria de la Comunidad y toma de conciencia del reto demográfico', con un total de 106.864 euros.
En cuarto lugar, se desglosa una actividad que lleva como nombre 'Conmemoración y difusión del quinto centenario de la Guerra de las Comunidades en 2021', con una inversión total de 618.690, y la quinta y última relativa a la celebración de la fiesta de Villalar, dotada de 337.467. La previsión de ingresos a obtener por la entidad en ese conjunto de actividades durante aquel año 2022 es de 1.306.000 euros, poco más de los 1.261.997 euros que se gastaron en esas cinco actividades.
Por otro lado, si se quieren consultar las licitaciones actuales de la Fundación, en la web aparece automáticamente el siguiente mensaje: "Actualmente no hay ninguna nueva licitación". El portal de la entidad se limita a exponer brevemente la historia de la misma, sus estatutos, algunos proyectos como la Escuela de Deporte Inclusivo o el Premio Valores Democráticos, aunque el último cartel que aparece es de 2022. También existe un apartado dedicado al V Centenario de la revuelta comunera, cuyas celebraciones concluyeron en ese mismo año.
Un presupuesto cada vez más mermado
Además, el presupuesto de la entidad se ha visto considerablemente mermado durante los últimos años. En febrero de 2023, el Patronato de la Fundación aprobó un presupuesto de un total de 750.000 euros, el 20% de ellos destinados a la organización y celebración de la Fiesta de Villalar, unas cuentas que supusieron una reducción nada menos que del 40% con respecto al año anterior, en el que el presupuesto de la entidad era de 1.200.000 euros.
Esta reducción en las cuentas de la Fundación de Castilla y León condujo a que el alcalde de Villalar de los Comuneros, Luis Alonso Laguna, acusase a Vox de querer "dejar morir de inanición" la fiesta de la Comunidad, mientras que el PSOE acusó a Mañueco de aliarse con García-Gallardo para "dinamitar" el Día de la Comunidad.
La ofensiva de Ciudadanos que quedó en nada
La llegada de Vox al Gobierno pone en vilo a la ya diezmada Fundación
La llegada de Vox al Gobierno de Castilla y León, en marzo de 2022, puso en vilo a la ya diezmada Fundación. Tan solo un día después de la investidura de Alfonso Fernández Mañueco como presidente en virtud del acuerdo firmado por ambas formaciones, los de Juan García-Gallardo anunciaron que iban a "reducir y racionalizar" el presupuesto de la Fundación de Castilla y León, en su lucha por "eliminar el gasto superfluo".
Además de esa oposición de la formación a este tipo de entidades, se sumó el hecho de que Vox es un partido que está en contra del Estado de las Autonomías, aunque paradójicamente forme parte del Gobierno autonómico, y la Fundación de Castilla y León cuenta entre sus principales tareas con la organización de los actos del 23 de abril, Día de la Comunidad.
Los de García-Gallardo no han disimulado nunca su animadversión a esta fiesta, a la que han acusado de estar "secuestrada por la izquierda" y Pollán no ha acudido ni un solo año a la campa de Villalar desde que fue nombrado presidente de las Cortes, en abril de 2022. Además, otra muestra del poco valor que el partido otorga a esta efeméride es el hecho de que, en el calendario laboral de 2023, la Consejería de Industria, Comercio y Empleo, dirigida por Mariano Veganzones, de Vox, eliminó el festivo del lunes 24 de abril, al que debía trasladarse el Día de la Comunidad, al caer en domingo, para establecer como festivo el 25 de julio, día de Santiago Apóstol, patrón de España, una festividad más acorde con los caballos de batalla políticos de la formación.
El pasado jueves, tras el Consejo de Gobierno, se anunció la creación de una nueva fundación que podría dejar aún más en segundo plano a la Fundación de Castilla y León y quien sabe si terminar sustituyéndola. Se trata de la Fundación de Promoción de los Valores y la Identidad de la Comunidad, destinada a conmemorar los 800 años de la unión de los reinos de Castilla y de León, que tendrá lugar en 2030. El enésimo intento por potenciar el sentimiento de pertenencia a la Comunidad a unos ciudadanos que, hasta el momento, se resisten a tenerlo.