Momentos surrealistas los que se están viviendo en Madrid durante el Comité Federal del PSOE que está sirviendo para mostrar el apoyo y pedirle que no se vaya al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Desde primera hora de la mañana, la calle Ferraz se ha convertido en un homenaje y un canto para que el líder socialista no se vaya. Allí por supuesto ha estado presente el PSOE de Castilla y León con caras tan conocidas como Luis Tudanca, Óscar Puente, Ana Redondo, Virginia Barcones, Javier Izquierdo o Ana Sánchez. Según las estimaciones de la delegación de Gobierno, han sido 12.000 personas las que se han reunido en torno a esta especie de show montado desde el bando socialista.
Hay que recordar que al menos 13 autobuses, tres de ellos desde Valladolid, han partido de las distintas provincias de la Comunidad a distintas horas para estar a las 11 en la sede de Ferraz. Allí ha estado presente el líder regional, Luis Tudanca, que a Tudanca ha suplicado a Pedro Sánchez que escuche “el aliento” del partido y se quede porque “esto merece la pena”. También ha estado presente el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible y secretario general del PSOE de Valladolid, Óscar Puente, que ha pedido al presidente que siga en el cargo a partir del lunes para “seguir haciendo historia de la buena”. “No puedes rendirte y entregar a la derecha lo que busca, la cabeza del secretario general del Partido Socialista y con ella la justicia social de este país. No puedes permitirlo, Pedro”.
Los discursos se intercalaron en los exteriores de la sede con los gritos de los manifestantes: “¡No estás solo!”, “¡Pedro, quédate!”, “¡No pasarán!”, “¡Pedro, estamos contigo!”, “¡Presidente, presidente!” Incluso alguno a ritmo de canciones como la de Quevedo, el cantante claro, no el escritor.
Según informa Ical, la llegada de los dirigentes territoriales, así como de los ministros, fue jaleada por los militantes que ya se encontraban en la calle. De hecho, varios ‘barones’, como el castellano y leonés Luis Tudanca o el asturiano Adrián Barbón, saludaron y agradecieron a la multitud su presencia allí a pesar de la lluvia que llegó a caer con fuerza por momentos. Los cientos de personas siguieron las intervenciones de los barones a través de una pantalla instalada en la puerta de Ferraz, y sobre todo, a través de la megafonía que llevó las palabras de los barones a cada rincón de la calle.