El delegado del Gobierno, Nicanor Sen, ha presentado en la mañana de este martes el nuevo plan de choque que la Dirección General de Tráfico activará en las carreteras de Castilla y León a lo largo de este 2024, con el fin de reducir la siniestralidad en las carreteras de Castilla y León, ante el repunte de fallecidos registrado en los últimos meses.
Una iniciativa formada por ocho nuevas medidas que, tal y como han dado a conocer el delegado, la coordinadora de la DGT en Castilla y León, Inmaculada Matías; y el teniente coronel jefe de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Castilla y León, Francisco González Iturralde, contemplan la instalación de ocho nuevos radares, dos fijos y seis de tramo, en aquellos lugares donde más siniestralidad vial hay, pese a que, por el momento, la ubicación exacta aún está por decidir.
También nuevas campañas especiales de vigilancia para colectivos concretos como motoristas y conductores de vehículos de transporte profesional. De este modo, se sabe que se van a aumentar los controles de alcohol y drogas a conductores de vehículos de transporte profesional, ante el notable crecimiento de siniestros protagonizados por este sector de la población.
También se van a poner en marcha acciones para incrementar la seguridad de los motoristas, a través de campañas de concienciación y prevención, así como de control y vigilancia por parte de la Guardia Civil, con el apoyo de motos camufladas de la Guardia Civil y medios aéreos, sobre todo, “en las zonas donde hay más afluencia de motos”. ¿La finalidad? Prevenir las infracciones más peligrosas en este tipo de vehículos.
El plan de choque de la DGT también prevé el refuerzo de la plantilla de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil para intentar mejorar la cobertura de las unidades, con la incorporación de 61 efectivos a lo largo de este año, lo que elevará la cifra de agentes hasta alcanzar los 1.377.
A todo ello se suma una mayor vigilancia mediante cámaras en las zonas de mayor afección, más seguimiento por parte del Centro de Gestión del Tráfico, un mayor control aéreo y el refuerzo de vigilancia en autovías y autopistas, fundamentalmente, en días, horarios y tramos en los que se prevea una mayor afluencia de conductores, para así intentar frenar la tendencia al alza de la siniestralidad en este tipo de vía, que se ha visto incrementada en un 67% en este primer trimestre del año, con cinco fallecidos.
Asimismo, la iniciativa recoge la importancia de informar, concienciar y fomentar este plan de choque para intentar concienciar a todos los usuarios de conductas básicas como el uso del móvil, el cinturón de seguridad y el control de la velocidad, mediante paneles informativos; y de llevar a cabo medidas territoriales consistentes en reuniones con titulares de la vía, diputaciones y la Junta de Castilla y León, intensificando, además, la colaboración con policías locales y ayuntamientos para que también incidan en los comportamientos de seguridad vial.
Cabe destacar que estas medidas se pondrán en marcha con el fin de frenar el incremento de siniestros mortales y fallecidos, registrado en el primer trimestre de 2024 en comparación con el mismo periodo de 2023, pasando de 20 a 26 fallecidos en Castilla y León en 25 accidentes mortales, frente a los 18 del año pasado. De esos 26, siete han perdido la vida en León, cinco en Valladolid, cuatro en Zamora, tres en Soria, otros tres en Burgos, y uno en Ávila, otro en Palencia, otro en Salamanca y un último en Segovia.
21 han fallecido en turismos, seis de ellos sin llevar cinturón de seguridad, cuatro en motos y uno en camión. Por el contrario, en estos tres meses no se han registrado muertes de ciclistas, peatones ni tampoco ocupantes de furgonetas.
El grupo de edad predominante entre las 26 víctimas mortales de Castilla y León se concentra, como el año pasado, en mayores de 65 años con siete fallecidos, y los informes preliminares indican que entre las posibles causas de los siniestros viales se encuentran la distracción, el cansancio o sueño, la velocidad y el no respetar prioridad de paso. A todo ello se suma que, atendiendo a la temporalidad, se han incrementado en un 50% los fallecidos en fines de semana.
Por su parte, el número de heridos hospitalizados en estos tres primeros meses del año ha alcanzado los 70, 15 menos que en el primer trimestre del 2023.
Sin embargo, según ha dado a conocer Inmaculada Matías, este 2024 se han producido más siniestros graves con implicación de alcohol y se ha registrado un aumento de accidentes por velocidad inadecuada. Además, en cuanto al tipo de vía, los siniestros mortales han crecido en autopistas y autovías, y continúan aumentando las colisiones laterales y frontolaterales y las salidas de vía.