Vox afronta la recta final de la legislatura en Castilla y León tras sufrir un auténtico terremoto. El estallido del partido, tras la dimisión de su exportavoz Juan García-Gallardo el pasado lunes, ha generado turbulencias en el seno de una formación que venía convirtiéndose en las Cortes en la principal fuerza de la oposición a Mañueco.

Una situación a la que se ha sumado la expulsión −que Gallardo se negó a firmar, lo que provocó su salida− de los procuradores Ana Rosa Hernando y Javier Teira tras pedir más "democracia interna" a la formación y exigir la salida de Vox del grupo Patriotas por Europa y su regreso a los Conservadores y Reformistas (ECR).

El protagonismo de Vox en la oposición se había visto reforzado desde que el partido salió del Gobierno, en julio de 2024, y al calor de la grave crisis interna en el PSOE que desdibujó notablemente la labor opositora de los socialistas y convirtió a Gallardo en el principal rival de Mañueco en los plenos.

Vox se puso la camiseta de la oposición en los plenos de las Cortes y empezó a  protagonizar los más tensos envites parlamentarios con el presidente de la Junta, recordándole sus compromisos incumplidos mientras ambos partidos gobernaron juntos.

Cuando ese nuevo Vox opositor, que presumía de sus principios al abandonar el Gobierno de coalición, se estaba asentando, con la mirada puesta en las elecciones autonómicas y con halagüeñas perspectivas electorales según las encuestas, el pasado fin de semana se encendía la mecha de la bomba que estalló el lunes. 

La nueva era Hierro

El Grupo Vox, no obstante, se ha reorganizado rápido y tratará de dejar atrás cuanto antes la traumática dimisión de su principal referente en la Comunidad, tratando de seguir haciendo una férrea oposición a los populares. 

Con su nuevo portavoz, David Hierro, a la cabeza, el partido seguirá la misma línea que en los meses anteriores y llevará a la Cámara algunos de sus principales caballos de batalla políticos.

Entre ellos, la lucha contra la inmigración ilegal y masiva, la defensa del campo y de la industria, el combate contra la ideología de género, la defensa de la unidad de España y de la familia o las bajadas de impuestos.

Al pleno de este martes, Vox llevará una iniciativa para exigir al Gobierno de Mañueco que devuelva a todos los menores extranjeros no acompañados a sus países de origen, en lo que es toda una declaración de intenciones de la línea a seguir de la formación con el objetivo de proyectarse como alternativa.

El partido seguirá incidiendo, durante el nuevo periodo de sesiones, en denunciar la "deriva progre" del presidente de la Junta de cara a las elecciones autonómicas que, como tarde, tendrán lugar en marzo de 2026. Unos comicios en los que el partido aspira a obtener un gran éxito electoral a tenor de la tendencia de las encuestas.

Vox, con Hierro a la cabeza, afronta unos meses decisivos en los que se vislumbrará hasta que punto acusa la ausencia del siempre combativo Gallardo o consigue sobreponerse y trasladar la idea, repetida durante los últimos días, de que lo importante son los principios y la línea marcada por Santiago Abascal.

"Vamos a defender nuestros principios"

El viceportavoz del Grupo Vox en las Cortes, Carlos Menéndez, ha asegurado, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León que Mañueco "está sin rumbo y mostrando una gran debilidad" y ha recordado que los populares llegan "a más acuerdos con el PSOE que con Vox".

De hecho, Menéndez se ha mostrado convencido que, en lo que se refiere a los presupuestos, el presidente de la Junta podría lograr un acuerdo como el alcanzado en la ciudad de Cáceres entre populares y socialistas "si sigue tan cerca del PSOE como últimamente". 

"Ni Mañueco ni Carriedo han contestado aún a nuestras propuestas", ha denunciado el viceportavoz. Vox exigió al Gobierno de la Junta que renunciase a acoger menores inmigrantes no acompañados y que dejase de estar "plegado" a los sindicatos, entre otros requisitos para apoyar sus cuentas.

En lo que se refiere al posible adelanto electoral, el viceportavoz ha señalado que Vox va a defender "igual" sus principios "si hay elecciones o si no las hay". "Que Mañueco haga lo que quiera, pero si Mañueco adelanta elecciones su única justificación sería por intereses partidistas", ha afirmado.

Menéndez ha recordado que Mañueco sigue teniendo dos opciones a la hora de dialogar y pactar: "o con Vox o con el PSOE". "Ahora mismo, está más cercano al PSOE e incluso ayer, el portavoz del Gobierno habló de negociar con los dos tránsfugas. Mañueco está sin rumbo y mostrando una gran debilidad", ha añadido.

El viceportavoz de Vox en las Cortes ha asegurado que su formación seguirá defendiendo "los mismos temas" que durante los últimos tres años en la Cámara autonómica, entre ellos, la lucha contra la inmigración ilegal y masiva, la defensa de la unidad de España y el combate contra la Agenda 2030.

Precisamente, el portavoz de Vox, David Hierro, acusó este jueves a Mañueco de ser el responsable del cierre del tercer turno en Renault por "adoptar los principios de la Agenda 2030" y hacer "seguidismo total de las agendas globalistas que llegan de Bruselas". "Esta es la consecuencia de lo que veníamos avisando", afirmaba.

En lo que se refiere a la nueva etapa del PSOE de Castilla y León con Carlos Martínez al frente, Menéndez ha asegurado que las relaciones entre Vox y los socialistas irán "como mucho a peor".

"La diferencia con Tudanca es que Carlos Martínez llega dando bendiciones con una escobilla de váter. Siempre lo hemos dicho, para nosotros no hay un PSOE bueno, algo que el PP aún no entiende", zanja el viceportavoz de Vox.

Una formación que, previsiblemente, seguirá llevando a cabo una contundente oposición a Mañueco en las Cortes con la vista puesta en las próximas elecciones autonómicas, en las que tratará de presumir de legado de gestión y de principios y dejar atrás los turbulentos episodios de la última semana.