Aunque la pasada noche se había hablado del fuego que iba hacia Valdemaqueda, lo cierto es que hoy el viento ha producido un nuevo cambio y el peligro se sitúa en El Hoyo de Pinares. Hacia allí se están desplazando los medios terrestres para combatirlo. El viento está soplando del sur de manera que el frente es en la zona sur de la carretera de El Hoyo de Pinares a Valdemaqueda, empujando el fuego al contrario que por la noche y abriendo un sector nuevo en zonas arboladas que se dirige hacia El Hoyo, según informa Ical.

"Hay un sector en el norte de la población de El Hoyo de Pinares que lo teníamos bastante tranquilo pero como ha cambiado el viento vuelve a abrir otro sector que es muy preocupante porque es un barranco lleno de árboles bastante altos y de difícil acceso para la extinción", explicó el director de extinción, Ángel Iglesias, que insistió que no va hacia Valdemaqueda sino que vuelve a El Hoyo de Pinares y en Cebreros se ha abierto otro frente que va a esa localidad. Es por ello que se han desplazado los medios de tierra y los aéreos.

En consecuencia, aunque se había hablado de una posible vuelta de los vecinos de El Hoyo de Pinares a sus casas, lo cierto es que está posibilidad se aleja, sobre todo con un frente que se dirige de nuevo hacia la localidad, aunque por otra zona del anterior. Con la situación actual no es recomendable el realojo, por lo que a lo largo del día se vera qué se puede hacer, cómo se comporta el viento y, sobre todo, el trabajo durante la noche, cuando hay "oportunidades de trabajo". Quizá, en 24 horas se pueda decir otra cosa, pero ahora mismo la situación es muy complicada.

Eso sí, con toda la precaución en un incendio en el que los vientos cambian completamente de dirección, por el momento no está previsto que haya nuevos desalojos. Si se abren nuevos frentes la situación podría cambiar.

Descartan la vuelta a casa

El delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Ávila, José Francisco Hernández Herrero, confirmó que hoy no se realojará a los vecinos de El Hoyo de Pinares, que continúan desplazados a Las Navas. Solo volverán cuando se pueda hacer en "condiciones de seguridad", dijo.

Hernández Herrero insistió en que lo principal, y así se establece en el plan de extinción de incendios de Castilla y León, es proteger la vida de las personas. Además quiso agradecer a todo el operativo el enorme esfuerzo que está realizando en las peores circunstancias posibles, en un fuego donde no se puede prever el comportamiento que va a seguir. Se busca proteger la vida de las personas y también la del operativo, donde hay presencia de distintas comunidades y del Gobierno de España, además de ayuntamientos y Diputación.

Explicó que esta noche tuvieron un "susto importante a primera hora de la mañana porque habíamos extraviado a un agente medioambiental que estaba trabajando con un bulldozer". "No podemos permitir la pérdida de ninguna vida humana y desde la Junta de Castilla y León se le ha encomendado a los equipos técnicos que marquen esa prioridad".

Desde el punto de vista territorial también se van a defender "todos los términos y todas las comunidades autónomas", incluyendo la Comunidad de Madrid, "limítrofe y hermana", haciendo lo posible para que el incendio no se extienda.

El viento, el mayor inconveniente para atajar el incendio

El mayor inconveniente que hay ahora mismo en el incendio de Cebreros y El Hoyo de Pinares es el viento, tanto por la variabilidad en la dirección como por las rachas que empujan las llamas contra los propios medios que están tratando de extinguirlas, lo que hace que tengan que replegarse y buscar otras zonas a partir de las cuales establecer una estrategia de ataque, aunque sea indirecto,  para acabar con los frentes de llama.

Según explican desde el operativo, eso es a lo que se están enfrentando, por lo que están haciendo un análisis de las zonas más peligrosas para tratar de establecer líneas de defensa que en caso de que se salte el perímetro de confinamiento que se está buscando volver a tener una oportunidad de actuar. 

Además del viento, también está el problema de que hay mucha masa forestal arbolada, la orogragía es muy compleja y es necesario tener zonas donde establecer líneas de apoyo previstas de antemano porque tal cual está comportándose el viento hay un gran riesgo de que se abran sectores potencialmente muy peligrosos.

Piden más medios

Para intentar contener el incendio se cuenta con un operativo parecido al del día anterior, con unas 250 personas. Según explicó el director de extinción "viene más apoyo aéreo, vienen más medios aéreos", con dos helicópteros de la Comunidad de Madrid y también con el Gobierno reforzando el operativo. Pero "están pedidos más medios, sobre todo hidroaviones. A ver si pueden venir porque es muy necesario a lo largo del día tratar de minimizar el frente de llama para evitar que pueda ir otra vez hacia el pueblo de El Hoyo de Pinares, esta vez por el flanco sur". 

Con esos refuerzos y el operativo actual se busca "acabar con el fuego y que nos permita hacer liquidación por algún sitio porque hasta ahora cuando hemos empezado a liquidar en algún punto nos hemos tenido que ir a extinguir a otros por esos cambios tan bruscos de la dirección del viento". Esta noche han tenido rachas de hasta 50 kilómetros por hora que "desbaratan cualquier actuación táctica de extinción".

Evitar que la "lengua" del incendio avance

Los medios del servicio de extinción trabajan a esta hora para evitar que la "lengua" del incendio de Cebreros (Ávila) avance hacia la localidad de El Hoyo de Pinares, que fue desalojada el lunes por la noche. Este miércoles está siendo un día "complicado" para hacer frente al fuego, según informó la Junta de Castilla y León.

En concreto, el operativo contra incendios de la Comunidad está pendiente del frente que avanza por el este de El Hoyo de Pinares y trabaja para que no afecte a las edificaciones dispersas que existen en la zona.