El Ayuntamiento de Candeleda, en Ávila, ha anunciado en un bando las medidas de carácter obligatorio que se recogen en el Plan de choque de ahorro y gestión energética con el objeto de reducir el consumo de energía, haciendo hincapié en disminuir el uso de gas natural.
Entre las obligaciones para paliar los efectos de la crisis energética se encuentran dos que han de cumplirse en el plazo de una semana y que estarán vigentes hasta el 1 de octubre de 2023. La primera es mantener la calefacción y refrigeración entre los 19 y los 27 grados respectivamente, la segunda corresponde a la colocación de carteles o pantallas en las que se indiquen las medidas de ahorro.
Además, antes de que termine septiembre, se deberá disponer de "cierres automáticos en las puertas de acceso", garantizando la mínima pérdida de energía. El alumbrado de escaparates y de los edificios públicos desocupados después de las 22 horas deberán estar apagados. Esta medida se hará cumplir en el plazo de una semana y estará en vigor hasta octubre del próximo 2023.
Por último, el alcalde, Carlos Montesino, traslada en este bando que los inmuebles que hayan pasado una inspección de la eficiencia energética en 2021 tendrán como obligación una revisión extraordinaria antes de que acabe el presente año.
Todas estas medidas buscan acogerse al Real Decreto-Ley 14-2022 del 1 de agosto, en el que desde el gobierno se busca la sostenibilidad, el ahorro de energía y la reducción del uso y, por ende, la dependencia del gas natural debido a los compromisos europeos causados por la crisis que ha causado la guerra de Ucrania.