Los más mayores de La Adrada, en Ávila, no se quieren quedar atrás tecnológicamente hablando. Buena muestra de ello es que, a pesar del esfuerzo notable que les puede suponer y el cambio de su propia mentalidad, 20 de ellos han decidido apuntarse al talle de aprendizaje tecnológico organizado por los voluntarios de Adamo a principios de este mes de noviembre.
De esta manera, una docena de empleados de Adamo, con el respaldo de la propia compañía en sus iniciativas sociales, enseñaron a los mayores diferentes opciones de las cosas más prácticas. Por ejemplo, pudieron iniciarse en el uso de Whatsapp, o bien aumentaron los conocimientos previos de la aplicación, ya fuese escribiendo mensajes o haciendo videollamadas.
Los 20 participantes de La Adrada aprendieron a dar con una ruta en Google Maps, aunque algunos prefieren llegar a los sitios como antaño: de memoria o preguntando a otros transeúntes.
También se atrevieron con YouTube, donde aprendieron una nueva receta de cocina o a volver a escuchar canciones de su época. En el evento colaboraron también el Ayuntamiento de La Adrada, Faema Salud Mental Ávila y la Asociación de Jubilados y Pensionistas del municipio.
La iniciativa de los voluntarios de Adamo en La Adrada está dentro del programa de acción social en el que la empresa crece junto a la comunidad en la que se implanta, en busca de un desarrollo sostenible de la mano del entorno en el que despliega la fibra óptica y en el que ofrece servicio de telefonía, internet y televisión a la carta.