Agentes de la Policía Local de Burgos detuvieron el pasado 25 de julio a un varón de 55 años por tener activa una requisitoria judicial. Según informaron fuentes policiales, los hechos se remontan a la mañana del jueves, cuando un varón se presentó en las oficinas de la Policía Local para el sellado de un permiso penitenciario, concedido por la prisión provincial de Burgos, según informa Ical.
Según explican, esta circunstancia es común en este tipo de permisos en los que deben personarse en dependencias policiales para el correspondiente sellado y así cumplir con las condiciones del permiso. El jefe de servicio de la Policía Local, para dar validez a la actuación, cotejó datos con el operador de sala 092, el cual informó de que esta persona tenía activa una orden de detención por parte del Juzgado de Instrucción número 1 de Torremolinos (Málaga).
Agentes de la Policía Local y Nacional gestionaron esta incidencia solicitando información e instrucciones a la Prisión Provincial de Burgos, toda vez que el preso tenía que presentarse ese mismo día e ingresar para seguir con el cumplimiento de su pena. Finalmente se remitió comparecencia al juzgado reclamante y M.E.H.L. de 55 años ingresó, de nuevo, en la prisión provincial de Burgos.